No nos gusta que nos digan que algo no se puede hacer, que es imposible. Y si un diseño constructivo no fuera contundente, tampoco hablaríamos del proyecto. Sin embargo, Sky Pool, la piscina planteada por el estudio HAL, levita entre dos edificios y se muestra como un alegato que desafía los límites de la imaginación y, casi más importante, las fronteras de la técnica.
Sky Pool, un puente apto para nadar
A través de una piscina transparente, el estudio de arquitectura HAL ha unido dos bloques de viviendas situados en el barrio residencial de EcoWorld Ballymore, en Nine Elms (Londres). Sky Pool se suspende 35 metros de altura ofreciendo una perspectiva única de la capital inglesa. Eso sí, no es apta para gente con miedo a las alturas.
Construida enteramente en paneles acrílicos y el gres porcelánico de Atlas Concorde, parece flotar entre los 15 metros que separan los edificios. El diseño, a simple vista, resulta muy sencillo: una estructura liviana, ligera y transparente. Pero nos gusta descubrir los límites para atravesarlos y después ir más lejos. Y es que necesitamos un pellizco para comprender que el planteamiento de los arquitectos brinda a los bañistas una experiencia única. Sky Pool se presenta como un espacio de ingravidez donde se puede levitar o sentir la impresión de estar volando.
La piscina transparente de HAL
El éxito del proyecto reside en su contundencia estética y en el gesto rotundo de un armazón transparente. En los primeros albores de la propuesta, la solución constructiva que se estudiaba requería de elementos sólidos, perdiéndose la idea de un cuerpo etéreo que flota entre dos inmuebles. No obstante, las decisiones técnicas —tanto en su detalle como en la acertada y rigurosa selección de materiales— fueron un requisito fundamental para no perder la coherencia de su morfogénesis.
Parte de ese triunfo es del equipo de ingenieros estructurales de Eckersley O’Callaghan, que han sido capaces de plasmar el volumen prístino, imaginado por HAL, mediante paneles acrílicos —como los empleados en oceanográficos— en los que la única concesión son dos tirantes de acero de 38 milímetros de espesor. Además, el índice de refracción del panel es muy similar al del agua, de manera que la luz apenas se distorsiona cuando lo atraviesa, acentuando la sensación de transparencia total.
En España no nos quedamos atrás en cuestiones de tamaño, ya que acabamos de inaugurar la piscina en voladizo más larga de Europa en el centro de ocio Odiseo.
HAL es un estudio de arquitectura con sedes en el centro de Londres y Liverpool. La práctica está dirigida por Hal Currey, quien pasó sus años de formación en Richard Rogers Partnership. Luego estableció FLACQ Architects, que se fusionó con Arup Associates en 2010, donde fue director.
La piscina une dos edificios en el desarrollo de Embassy Gardens en Battersea, Londres.