El estudio de arquitectura Atelier Xi ha elegido la forma en espiral como inspiración para su proyecto Serpentine Bookhouse en Shenzhen, China, una referencia que se puede a asimilar a ese camino de ascensión que nos ofrece la lectura.
Una biblioteca que nos conecta con lo sacro
La génesis proyectual de Serpentine Bookhouse ha sido la caracola: ese caparazón marino que genera una atmósfera de refugio y protección. Pero más que por su materialidad, Atelier Xi escogió este referente por su forma en espiral, como una curva que se va agrandando a medida que se aleja de su centro y que simboliza el crecimiento, la expansión y la evolución. Una figura que se asocia a las propiedades geométricas del rectángulo dorado y que nos conecta —matemáticamente— con lo sagrado y lo misterioso, con lo infinito y lo eterno.
Esta identidad morfológica expansiva no solo se realiza en el plano, sino que se soleva desde el suelo, generando una topografía de niveles escalonados. Este recorrido ascendente del edificio se asemeja, simbólicamente, con el efecto que la lectura ejerce sobre las personas. Es decir, una mente menos leída es más estrecha al principio y, como sucede en la construcción, conforme se avanza en el camino todo se ensancha.
La apuesta por el espacio público de Atelier Xi
La geografía de sucesivas terrazas permite una visión panorámica del entorno, algo parecido a un graderío de cine, donde la gran pantalla es el corredor ecológico del río Dasha.La estructura —unas vigas Vierendeel (una viga sin miembros diagonales) de acero— facilita que la fachada interior y exterior sean completamente acristaladas. Esto origina una vista cambiante del paisaje circundante mientras los visitantes suben por la biblioteca. Una sensación bastante similar a coronar una ladera e irse acomodando en los repechos para contemplar el sendero transitado.
Y es que la decisión de implantación de Atelier Xi pasó por conservar los trayectos existentes que rodean el volumen; un punto de partida potente que hace que Serpentine Bookhouse se pose en el área verde que no solo la atraviesa, sino que se sublima a través de nuevas plantas introducidas desde el paisajismo. El equipo chino demuestra un especial cuidado por crear un espacio público amable, cediendo gran parte de la planta baja a la ciudad y concibiendo un lugar de asiento, un banco de hormigón protegido del sol y las inclemencias meteorológicas por su piso superior.
En este enlace puedes encontrar otros proyectos diseñados por Atelier Xi.
Fundado en 2017 en Nueva York y ubicado actualmente en Shenzhen (China), Atelier Xi se dedica al diseño arquitectónico de proyectos públicos y culturales, buscando crear espacios poéticos y profundos en entornos urbanos y rurales contemporáneos.