022 estudio ha proyectado y diseñado sus nuevas oficinas en la calle Pelayo atendiendo a criterios de funcionalidad para el desarrollo de su actividad. Las nuevas instalaciones tienen como corazón un patio en torno al cual se desarrolla todo el programa de la actividad. Este programa lo conforma un espacio de reuniones, una sala de trabajo, un área de cocina y exposición y un laboratorio de materiales.
Las nuevas oficinas de 022 estudio responden a un estudiado programa en el que el bienestar, la comodidad y el confort del equipo han sido las premisas de partida.
Un programa para crear arquitectura
El proyecto se desarrolla en torno a tres puntos de entrada de luz. La fachada, que vierte a la calle Pelayo, un pequeño patio en la zona intermedia y un gran patio en la parte trasera. Se destina la zona de atención al público en la zona de acceso. Un gran pasillo central actúa como vial de comunicación de las diferentes estancias.
Nos recibe la zona de atención al público, en la que se ha podido recuperar el pavimento original como alfombra bajo una mesa circular en la que se trata con los clientes. Tras esta, aparece una de las entradas de luz natural que ilumina y ventila tanto la sala de reuniones como los servicios higiénicos.
Protegido de la visual exterior por un volumen negro que abarca los espacios anteriormente citados aparece el área de trabajo. Un espacio cómodo y aséptico que vierte en su totalidad al patio trasero y en el que las carpinterías exteriores permiten una conexión real con el espacio exterior.
En la zona trasera se desarrolla el programa de carácter privado, espacios de trabajo, laboratorio de materiales, área de comedor y cocina. Todo conectado visualmente con el protagonista del espacio: la fuente de luz natural y de conexión con la naturaleza que representa el patio de 022 estudio.
Buscando la neutralidad
En cuanto a la materialidad, la apuesta era sencilla y contundente. El monocromo toma presencia en diferentes materiales, a saber, hormigón, metal, cerámica y vidrio. La idea es presentar un espacio neutro que no ponga límites a la creatividad que caracteriza el trabajo del estudio.
El pavimento queda resuelto mediante una solera de hormigón pulido que conecta todos los espacios, tanto interiores como exteriores. Esto permite una lectura de continuidad de todas las zonas que componen el proyecto.
En constante conexión con el exterior
Si bien el protagonista del espacio es el patio trasero, su notoriedad no tendría sentido sin la apuesta por una completa conexión visual que se genera a través de las carpinterías exteriores de gran formato. Diferentes sistemas permiten una conexión directa tanto visual como espacial gracias a las posibilidades de apertura que presentan.
Logrando el orden
Todos los espacios cuentan con zonas de almacenaje donde quedan ocultas partes del programa necesario del estudio. Área como la reprografía, la zona de encuadernado, el archivo o el laboratorio de materiales quedan completamente integradas. Destacando la visibilidad de la biblioteca de materiales que da continuidad al área de cocina.
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