El equipo seulés de arquitectura Betwin Space finalizó hace unos meses uno de sus últimos proyectos. Se trata del diseño del restaurante Kappo Akii, que pertenece al famoso Glad Hotel Seoul en Corea del Sur. El estudio realiza en el interior algo más que un punto de encuentro para comidistas: una experiencia completamente inmersiva.
El diseño de restaurante de Betwin Space
A pesar de que su fuerte es el retail, los diseñadores de Betwin Space dominan con destreza el ámbito de la restauración. Pop ups de comida rápida asiática, pastelerías o cafeterías brillan en el porfolio de estos creadores, que incluyen siempre un tono juguetón y unas pinceladas de elegancia en sus interiorismos.
El caso del restaurante Kappo Akii es posiblemente una de sus apuestas más sobrias, pero no por ello es menos atrayente y cautivadora. De hecho, todo lo contrario, pues el juego de mobiliario y materiales junto con la escasa luz del lugar convierten la visita al establecimiento en una vivencia inolvidable.
El Kappo Akii en el Glad Hotel Seoul
La llegada a Kappo Akii comienza de manera especial. Los comensales bajan en ascensor hasta un pasillo desde el vestíbulo del hotel. Esta conexión subterránea entre el nivel de la calle y el sótano simula el viaje a “otro mundo”; una bienvenida que es toda una declaración de intenciones y adelanta sin rodeos lo que el edificio puede contener.
Si se continúa por el trayecto, las moquetas, la madera y los vidrios compiten para ver quién es más protagonista. Lo cierto es que cualquier material sin la compañía del otro perdería fuerza y dinamismo. Además, es interesante observar cómo cada zona apenas se parece a las aledañas: mesas pequeñas semicirculares, sillas dentro de óvalos o salas aisladas son parte de un restaurante que no sigue patrones de repetición al uso.
La decoración es muy ligera: destacan algunas plantas, unas rocas flotantes y unas esferas transparentes. La verdadera riqueza en las estancias la aportan los asientos y las decenas de estampados y texturas que llevan consigo las paredes, la barra o las mesas.
Una experiencia inmersiva creada por Betwin Space
La luz es un matiz fundamental porque inunda sin permiso todo lo que tiene a su paso. Por eso, el carácter oscuro y secreto y la personalidad solemne del sitio determina este parámetro. Esta decisión arriesgada —teniendo en cuenta que los diseños de Betwin Space están mayormente sobreexpuestos— traslada al usuario a un terreno adverso en el que se siente protegido por una cabina incomunicada.
Esta propuesta inspecciona, sin duda, nuevas formas y límites que configuran el espacio. Los arquitectos asiáticos confían en un discurso que abre las puertas a la exploración y a disfrutar de auténticas experiencias en plena ciudad. Y este restaurante en el Glad Hotel es un ejemplo de ello.
En este enlace puedes ver más interiorismos de bares y restaurantes.
En el hotel Glad, en Seúl. Concretamente en el restaurante de su planta baja.
El lugar está envuelto por un aire de misterio y oscuridad. Es la luz la que provoca estas sensaciones.
Crear experiencias inmersivas y memorables en sus interiorismos.