Yangtze River International Conference Center. Un pez de titanio según Morphosis Architects

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En Morphosis Architects describen Yangtze River International Conference Center como una sucesión de formas y revestimientos que difuminan interior y exterior. Sin embargo, pese al poder que tiene la palabra, me temo que quien no lea la nota de prensa de Morphosis o su traslación literal en numerosas webs, seguramente tenga otra opinión conceptual del proyecto.

Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects. Edificio de titanio
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects

El que fuera chico rebelde de la arquitectura, Thom Mayne, con su estudio angelino Morphosis y el Pritzker en la estantería, ha levantado un centro de conferencias y complejo multiusos a orillas del río Yangtsé, arteria fluvial serpenteante que a día de hoy sigue constituyendo una de las principales vías de desarrollo económico y social de China. Es a su paso por Nanjing —nexo clave entre las ciudades costeras del este y las tierras del delta— donde se ha querido apuntalar la expansión de la región hacia el oeste y asegurar el epicentro de este nuevo distrito de negocios internacional con la construcción del Yangtze River International Conference Center.

Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects. Edificio de titanio
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects. Edificio de titanio
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects

Thom Mayne y su socio Eui-Sung Yi describen la propuesta como una sucesión de formas y revestimientos que difuminan interior y exterior. Sin embargo, pese al poder que tiene la palabra, me temo que quien no lea la nota de prensa de Morphosis o su traslación literal en numerosas webs, seguramente tenga otra opinión conceptual del proyecto.

Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects. Edificio de titanio
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects

Es cierto que el edificio pretende acompañar las líneas del Yangtsé con fachadas sinuosas, aunque esto es algo que se puede apreciar solo en planta, porque estas fachadas son más brutalistas que orgánicas, más afines al bello y fabril Euskalduna de Federico Soriano que al organicismo constructivista de Fernando Higueras —salvando las distancias, grandes, con estos—.

Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects. Edificio de titanio
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects. Edificio de titanio
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects

La enorme cubierta sí que refleja la luz como la bailarina agua del río. No en vano, está panelada con 50 000 m2 de escamas de titanio. Y digo escamas porque la base tiene la silueta de un gigantesco pez abierto en dos mitades, separadas estas por una galería de 200 metros que articula las comunicaciones entre los distintos espacios flexibles para conferencias.

Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects. Edificio de titanio
Yangtze River International Conference Center. Morphosis Architects

El segundo elemento del complejo es un hotel que quiere emular las velas de los clásicos juncos —esas embarcaciones que vio Marco Polo en sus viajes—: un enorme rectángulo con dos caras muy diferenciadas y ambas protegidas con brise-soleil para incrementar la eficiencia energética. Aun así, y pese a la intencionalidad —sobre el papel— de recordarnos la fluidez, ondulación y conectividad con el río, el Yangtze Conference Center se queda más en un robótico e inmenso pescado reluciente con su cartelito de precio clavado.

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