El SaloneSatellite está de celebración tras cumplir 25 años al servicio de los jóvenes creadores dentro del Salone del Mobile.Milano. Así lo vivimos en su exposición Universo Satellite. 25 years of SaloneSatellite en la Triennale, donde nos sumergimos en un viaje por la historia de esta plataforma de prestigio, que marca los nuevos ritmos, advenimientos y sinergias del diseño contemporáneo.
SaloneSatellite: un espacio al servicio del diseño emergente
Todo proyecto consolidado surge a raíz de una inquietud; también de la necesidad de suplir una carencia o de convertirse en el faro que alumbra por donde nadie se atreve a caminar. Con esta audacia, cualquier propuesta se traduce en éxito si el empeño que la moviliza nace del apoyo a nuevos talentos. Y en esta tarea, Marva Griffin Wilshire es sin duda ese “ojo que todo lo ve” dentro del mundo del diseño. Porque si hablamos de faros y de iluminar nuevos senderos, no hay figura de renombre en la disciplina que no haya pasado bajo su foco en una de las apuestas más importantes del último cuarto de siglo: el SaloneSatellite.
Desde 1998, la puesta en marcha de esta plataforma dentro de la programación del Salone del Mobile.Milano ha sido uno de los acontecimientos que más impacto ha tenido en el sector. No solo por impulsar, visibilizar y acompañar, sino también por erigirse como un epicentro de creatividad desde el que se hace magia pensando en el futuro. La propia Marva cuenta que esta iniciativa surgió para darle un espacio a los jóvenes creadores que solían exponer en el Fuorisalone: “Porque una cosa es hacer espectáculo en una galería si tu nombre es Ettore Sottsass, y otra si eres completamente desconocido y necesitas que la industria vea tus prototipos”.
Contar una historia desde las salas de la Triennale de Milano
Después de 25 años desde que Mario Armellini —CEO por aquel entonces de Cosmit— pronunció aquella frase de “Marva, see what you can do for young talents here at the Salone”, podemos decir que el SaloneSatellite ha dejado de ser un astro dependiente para convertirse en un universo autónomo y reconocible. Fuimos testigos de ello en la Triennale de Milano, con una exhibición que nos condujo por todos sus entresijos, edición tras edición, panel a panel, pieza a pieza, como un laberinto por el que perderse sin demora. Comisariada por Beppe Finessi y con diseño expositivo de Ricardo Bello, UniversoSatellite, 25 years of Salone.Satellite fue el reflejo de toda una vida más allá del objeto.
Porque sí, nos encontramos con sillas, lámparas y mesas reconocibles como la Fish Chair de Satyendra Pakhalé, a la que Griffin y Finessi consideran “uno de los iconos de diseño del tercer milenio”. También con la luminaria escultural La La de Helena Kontouris o el archiconocido Plopp stool de Zieta Studio. Pero también en las altas paredes añiles de las salas se mostraban documentos, entrevistas, bocetos, fotografías y el listado de participantes, escuelas y ganadores de los premios del SaloneSatellite de estos últimos 25 años. Un vuelco de información donde podían leerse los nombres de Patrick Jouin, Nendo, Álvaro Catalán de Ocón o las Front, devolviéndonos a la nostalgia de sus inicios.
Universo Satellite. 25 years of SaloneSatellite supone un punto de inflexión y de rigor en las postrimerías del diseño actual. Una máquina del tiempo que nos ha hecho visitar, desde 1998 a 2023, toda una evolución de estilos, materiales, soluciones e iconos que han ido impregnando las recientes décadas de la disciplina. “Be a sponge, absorb everyting around you” firmaba el colectivo Postfossil en la salida de la exposición. Una frase que condensa la intención del SaloneSatellite de enseñar y poner en el camino correcto a los talentos que brotan y a los que estamos deseando descubrir. ¿Quiénes serán los próximos en recibir las palabras “Come, come! Hope to see you!” de Marva Griffin?
