Un bosque es un elemento vivo que está en continua transformación. Y esta idea de cambio es el concepto sobre el que se sustenta Forest Loops de Suppose Design en Hamakita, Japón. En esta escultura de formas redondeadas y color blanco, cada cual puede tirar de imaginación y perderse entre sus «ramas entrelazadas».
Sentirse como en una montaña rusa, colocar una red que dé lugar a un parque infantil, o incluso construir una casa a modo de arquitectura residencial arbórea, pueden ser alguna de sus muchas posibilidades. Cualquier cosa que rompa con el precepto de que, una vez finalizado un proyecto, también finaliza el sentido con el que se ha realizado.
El punto de partida de los diseñadores ha sido claro: que Forest Loops crezca y se amplíe con el paso del tiempo. Lo que ha dado lugar a una estructura a medio camino entre la escultura, el arte o la arquitectura social.
