La concepción actual del hábitat resta cada vez más espacio a la cocina, lo que hace implica que muchas veces se vea comprometida la accesibilidad a los objetos que ahí se almacenan.
Con Wing, el joven diseñador David Curto, hace una propuesta resolutiva a este problema, acercando este tipo de almacenamientos a todo tipo de usuarios.
Actualmente, las cocinas son uno de los espacios del hábitat que más necesitan de espacios de almacenamiento, ya sea para guardar platos, menaje o comida. Además, a la hora de pensar la distribución de una vivienda, el espacio reservado a la cocina suele verse menguado con la intención de hacer más confortables otras zonas de más uso como habitaciones o salones. Y es que los muebles altos han sido durante años una solución de paso a una necesidad de almacenamiento en nuestras cocinas, muchas veces sin tener en cuenta la accesibilidad que el usuario pueda tener a los objetos almacenados en su interior.
Wing nace de la necesidad de proporcionar un acceso rápido y eficaz a un espacio de almacenamiento que, tradicionalmente, ha sido tan necesario como inaccesible en nuestras cocinas.
En este sentido, el joven diseñador David Curto ha ideado un sistema que acerca esta zona al usuario, proporcionándole un acceso limpio, rápido y eficaz a los elementos almacenados. El sistema funciona gracias a un sistema de doble viga que asegura la estabilidad de las baldas al descender, además de un sistema articulado que le proporciona un movimiento ligero y suave que disminuye notablemente el esfuerzo necesario para su accionamiento. Todos estos elementos hacen que el sistema sea cómodamente utilizable por todo tipo de usuarios y en todo tipo de cocinas, ofreciendo una solución versátil y confortable.
La mayor parte de Wing está realizado en aluminio que, junto a sus baldas extraíbles y mecanizadas en madera, le aportan resistencia al producto, además de una gran capacidad de integración en todo tipo de cocinas y ambientes.
- Estudio
- David Curto
