Orilla del río Duero, con la vista puesta en el puente Don Luis I y en pleno casco histórico de uno de los centros vinícolas más importantes del mundo: Vila Nova de Gaia, colindante con Oporto. Ahí se yergue WOW, un modernísimo distrito cultural creado en 2020. La pasión por la historia, la cultura y el encanto de entender la vida desde las raíces y el disfrute han dado lugar a sus ocho museos, donde hacemos un repaso por cinco de sus exposiciones más ineludibles para cualquier visitante de la ciudad lusa.
1. Galería WOW. Belleza Serena. 40 años de #EstiloVerino
Recién inaugurada a mediados de julio, Belleza Serena — 40 años de #EstiloVerino es una exhibición incomparable sobre la carrera de uno de los modistos más renombrados de todos los tiempos. Tras girar por 12 ciudades españolas, llega a Oporto de forma gratuita hasta el 7 de agosto para presentar el poder creativo del diseñador gallego Roberto Verino, quien recibió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en 2007.
Cuatro décadas de trabajo inmaculado, vinculado ante todo a la moda prêt-à-porter femenina, que han vestido modelos como Christy Turlington o Helena Christensen para las cámaras de grandes fotógrafos: Eloy Lozano, Paco Navarro, Jacques Olivar, Javier Salas… “Sueños, liderazgo, contratiempos y, sobre todo, superación” como pilares de una labor en equipo, que han hecho de su firma un sinónimo de la elegancia más tranquila, con menos estridencias. Como su triunfo.
2. The Atkinson Museum – Dalí Universe Exhibition
Pocas palabras más precisas para calificar el arte de Salvador Dalí que “universo” o “universal”. Aquello que cabe en la mente —y que puede llegar a sobrepasar los límites del mundo conocido— quedó plasmado en las pinturas y en el estilo de vida del genio de Figueres. Y todo eso se recoge ahora en The Atkinson Museum, la casa señorial de casi 300 años de historia que alberga la exposición Dalí Universe Exhibition hasta el último de octubre.
Desde fotografías históricas del artista hasta memorabilia, como su sempiterno bastón o su propio “periódico”. Pero también grabados y óleos que harán las delicias de quienes admiren a uno de los mayores exponentes del surrealismo universal.
3. The Chocolate Story
Un gran cartel con la palabra chocolate en multitud de idiomas: porque no hay rincón de la Tierra en el que no exista algún amante de la mágica y dulce perfección de este manjar. En Chocolate Story se plantea un exquisito recorrido por la vida del cacao, desde su origen amazónico hasta la enorme producción actual, sin olvidar su etimología, su cultivo, su elaboración o su comercialización internacional.
Un paseo pensado para descubrir —en particular para los ojos de los más pequeños— los miles de años de historia que hay en esa simple onza que nos introducimos en la boca. Interactivo y juguetón con los sentidos —hasta para poner a prueba el olfato—, el espacio reivindica a los trabajadores que hacen posible su recogida y a la maquinaria —antigua y moderna— que ha conseguido su movilización a lo largo y ancho del globo terráqueo. Y por si había alguna duda: es posible probar algún que otro bombón durante la experiencia.
4. The Bridge Collection – The Art of Drinking
Prácticamente todas las civilizaciones del mundo antiguo alcanzaron, de un modo u otro, el alcohol fermentado como elemento ritual o social extrayéndolo de aquello que tenían a mano: la uva, la cebada, el trigo, el arroz, el maíz, la manzana… Pero incluso sin ello, el acto de beber —así fuera agua o leche— ha sido indispensable en la historia de la humanidad. Y ha llegado a ser un auténtico arte, como se ve en la muestra The Art of Drinking en The Bridge Collection.
Vasos, vasijas, ánforas, jarras, cántaros, botijos, cuencos o tinajas de cerámica, cristal, vidrio, madera, alabastro, piedra o coral son el reclamo y los faros que van iluminando el camino de la libación y el refresco durante miles de años; con parada obligatoria en el hermoso acto de brindar, aunque no haya veneno en ninguna de las copas. Más de 2000 objetos que enseñarán cómo se ha bebido a lo largo del tiempo, ya se fuera campesino, religioso, reina, guerrero, aristócrata o emperador.
5. The Wine Experience
Y para acabar, nada mejor que sentirse enólogo por un día. O, al menos, enófilo durante la hora y media que dura el itinerario de The Wine Experience. Esta pequeña aventura inmersiva persigue que el visitante comprenda y entienda el origen del vino, las condiciones necesarias para el desarrollo de los viñedos y de uvas perfectas y, por supuesto, el ciclo de su elaboración. Desde la vendimia hasta la tonelería o el embotellado, todo se nos enseña salpicado de auténticos ejemplos del trabajo humano, como montar el tractor a la cata sensorial y piezas de arte o utensilios bodegueros.
La segunda planta, ya sí, está dedicada a Portugal y a sus regiones vinícolas, centrándose en la habida cuenta de la gran extensión y diversidad de sus vinos y en su globalización, en su pasado, su presente y su futuro.
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