Para celebrar un aniversario tan significativo como el cuarto de siglo, la exposición de proyectos de interiorismo Casa Decor desembarcó por primera vez en el exclusivo barrio de los Jerónimos. La fuerte impronta novecentista tanto del entorno como del inmueble donde tuvo lugar inspiró a la arquitecta Izaskun Chinchilla a la hora de reformar la antigua portería para convertirla en el auditorio de este “encuentro nacional” de interioristas que se desarrolló en Madrid a lo largo del mes de mayo. Como explica ella misma, este espacio supuso una actualización del repertorio estético del romanticismo. De ahí el gusto por la ruina, por el deje orientalista o por poner los sentimientos en primer lugar. Etimológicamente, un sentimiento romántico es el que requeriría de una novela (roman, en francés) para poder describirlo. Es la conquista de lo inefable, lo que no se puede ni expresar con palabras. Poniendo la libertad por delante de todo, el romanticismo supone una exaltación de la personalidad individual y la ruptura de las reglas establecidas. La arquitecta madrileña hizo gala una vez más de todas estas virtudes, y muchas otras. Para ella, la rehabilitación es un ejercicio de naturalidad e imaginación.
En esta reforma, Izaskun no hizo tabula rasa, alicatando hasta el techo o pintando todo de blanco. Muy al contrario, jugueteó con la memoria del lugar. Reunió nuevos materiales, como los paneles acústicos de madera microperforada de la firma española de soluciones de madera Finsa, junto a otros que ya conformaban el espacio, para que lo existente nos susurrara al oído las historias que ha vivido. De esta manera, al entrar en el auditorio, no veíamos sólo la época de la rehabilitación, sino las diversas capas de historia que se han ido aplicando a cada paramento. Chinchilla tomó, además, la provisionalidad de la reforma como símbolo de la libertad del diseñador para re-imaginar nuestro día a día. Así, combinó tanto macetas como muebles usados o nuevas telas estampadas, haciéndonos sentir espectadores del instante único en el que conviven materiales de tan diferente obsolescencia.
