Mediante el uso de herramientas como el diseño paramétrico o las IA, Andrew Kudless erige edificios digitales que se caracterizan por una belleza abstracta y una materialidad liviana.
El vacío como manifiesto de Andrew Kudless
El aire ha tenido una lógica importancia en el acondicionamiento del hábitat humano. Es un elemento imprescindible para atemperar la vida y tiene un peso importante como concepto en el espacio “vacío”. El aire es la sustancia a través de la que pueden manifestarse todos aquellos efectos ambientales propios de la arquitectura, especialmente si hablamos de Andrew Kudless. Los edificios de Kudless y Matsys —su estudio de diseño— se diluyen en su evanescencia. La enigmática belleza de sus translúcidas producciones digitales conforma un sistema que se descarga paulatinamente de jerarquías para hincharse de éter.

Viendo estos trabajos, es inevitable acordarse de las instalaciones del surcoreano Do Ho Suh. En la obra de ambos existen sinergias compartidas en cuanto a simplicidad geométrica y materialidad liviana. Esto provoca que la luz se distribuya con intensidades y propicie una sensación de mayor ligereza en unos volúmenes llenos de matices cromáticos, que no son otra cosa que puros gestos de voluntad creativa.


Arquitectura digital que se desmaterializa
En esta búsqueda de la levedad, hay dos factores que explican la relación de las creaciones de Kudless con la biología y la computación. Por un lado, el arquitecto pone el foco en hallar una comunicación algebraica mediante el uso de herramientas como el diseño paramétrico o las IA. Este hecho permite alcanzar proyectos inesperados por medio de las manipulaciones geométricas que conducen a deformaciones casi antropomórficas. Por otro, el mismo empleo de dichas técnicas pone de relieve que su práctica tiene como objetivo producir piezas con carácter e intensamente ligadas con su tiempo y con el mundo en el que hoy vivimos.


La estrategia de Kudless de levantar una arquitectura desmaterializada y difusa es casi atmosférica, y compone una de las nociones de belleza más abstracta y atractiva en el panorama estético actual: una nueva fisicidad que traslada el peso de los materiales tradicionales a la utilización del aire como elemento constructivo.


En este enlace puedes leer más artículos sobre otros creadores cuya carrera creativa se enfoca en el arte digital.
Lo más destacado de Andrew Kudless
¿Quién es Andrew Kudless?
Andrew Kudless es un arquitecto y diseñador que trabaja en la frontera entre la arquitectura, el diseño digital y la visualización generativa. Su práctica se centra en explorar cómo las herramientas computacionales, los algoritmos y las simulaciones permiten imaginar nuevas formas espaciales y materialidades.
¿Qué significa que su arquitectura digital se “hincha de éter”?
La expresión alude a una arquitectura que no se apoya en materiales pesados ni estructuras convencionales, sino en volúmenes, membranas y superficies que parecen inflarse en el espacio digital. Sus propuestas se perciben como livianas, etéreas y casi ingrávidas, más cercanas a una materialidad atmosférica que a la masa constructiva tradicional.
¿Qué papel tiene el diseño paramétrico en el trabajo de Andrew Kudless?
El diseño paramétrico permite a Kudless establecer relaciones entre variables —geometría, fuerzas, densidades, patrones— y generar así familias de formas que responden a reglas precisas. En lugar de dibujar cada elemento a mano, configura sistemas que producen arquitecturas complejas y adaptativas de manera algorítmica.
¿Cómo intervienen las inteligencias artificiales en sus proyectos digitales?
Las IA se utilizan como herramientas de exploración formal y visual: ayudan a generar variaciones, rellenar vacíos, simular comportamientos materiales o construir imágenes que combinan datos y especulación. De este modo, amplían el repertorio de posibilidades y desplazan el proceso de diseño hacia un diálogo entre humano y máquina.
¿Qué relación guardan estos edificios digitales con la arquitectura construida?
Aunque muchas de las propuestas de Kudless habitan principalmente el espacio virtual, funcionan como laboratorios de investigación formal y material. Algunos principios —como la organización espacial, la lógica estructural o el comportamiento de las envolventes— pueden trasladarse a proyectos físicos, ensayando así nuevas tipologías y soluciones arquitectónicas.








