La artesanía de Mazda se une a su tecnología de última generación en el nuevo Mazda MX-30 E-SKYACTIV R-EV. Un vehículo eléctrico híbrido enchufable que muestra su compromiso ecológico desde su primera conducción.
Independencia energética, respeto al medioambiente y apuesta por la conducción eléctrica. Estas son las señas de identidad de Mazda a la hora de crear sus vehículos. A esta ecuación, la empresa japonesa añade el tratamiento artesanal que aplica a su ingeniería y a su diseño. Una visión que vemos en su nuevo MX-30 e-Skyactiv R-EV: un eléctrico híbrido enchufable que da un paso hacia el futuro. Pero ¿qué tiene este modelo que lo hace único?
Versatilidad sostenible
Versatilidad de propulsión. MX-30 e-Skyactiv R-EV combina un motor eléctrico con uno rotativo como extensor de autonomía. ¿Qué significa eso? Que puede funcionar de manera totalmente eléctrica para recorridos diarios —con una independencia de 85 kilómetros, lo que mejora la condición del aire en entornos urbanos—, pero con la ventaja del motor rotativo que trabaja como extensor de autonomía: es decir, un generador para cargar la batería de alto voltaje del vehículo y proporcionar potencia adicional cuando sea necesario. En otras palabras, se pueden realizar viajes largos sin la urgencia de recargar. Adiós a la ansiedad de autonomía que a menudo se asocia con los coches eléctricos.
Sostenibilidad. Para Mazda, el bienestar del medioambiente forma parte de su filosofía creativa, y por ello la ha aplicado en la producción del MX-30 e-Skyactiv R-EV. Esto se refleja en el empleo de materiales naturales como el corcho —sello de la marca— y textiles reciclados en la tapicería. Asimismo, el proceso de pintura multitono es altamente eficiente y reduce las emisiones de CO2 en un 34-37%. Además, la carga inicial de las baterías se efectúa mediante energía solar en la fábrica de Mazda en Hiroshima, lo que disminuye aún más la huella de carbono. Conclusión: el futuro ha de ser limpio.
El silencio minimalista
Silencio por encima de todo. El MX-30 e-Skyactiv R-EV ofrece un manejo suave y sin apenas ruido —típico de la movilidad eléctrica—, el vehículo siempre es propulsado a través del motor eléctrico y dadas las pequeñas dimensiones y baja rumorosidad del motor rotativo, el silencio de marcha es una de sus características. Todo ello reforzado por sistemas de seguridad avanzados y una pantalla de información y entretenimiento llamada Mazda Connect de alta calidad.
Esencia minimalista. A esto hay que añadir un interior elegante y cuidado, que evidencia la preocupación de la firma por hacer del habitáculo un espacio de atmósfera zen. Hablamos del uso de componentes cálidos, con una estética de trazo japonés que busca infundir calma durante la conducción. O lo que es lo mismo, conseguir que el tiempo que los propietarios pasan a bordo del Mazda MX-30 e-Skyactiv R-EV sea una experiencia inspiradora que va mucho más allá del simple desplazamiento.
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