Con una trayectoria bien asentada en el campo del diseño y la arquitectura de interiores, David López Quincoces se ha construido a sí mismo a través de la experiencia en el oficio. En su visita al showroom de MINIM Madrid, hablamos con él para descubrir todo sobre su década junto a la firma Living Divani: un campo donde la fuerte identidad y el buen hacer han sido imprescindibles para el éxito.
De la teoría a la práctica
ROOM Diseño. – Con respecto a tu formación podríamos decir que has transitado varias disciplinas. ¿Qué fue lo que te motivó a dar el salto de la Historia del Arte al Diseño?
David López Quincoces. – El sentido de haber estudiado Historia del Arte se debe a que en ese momento era lo que me gustaba. A posteriori no me arrepiento de haber hecho este recorrido; conocer todo en torno a la arquitectura, la pintura y el diseño te da un buen background para ampliar tu valor estético y ayudarte a discernir. Al final ha sido la pasión la que me ha llevado a aprender el oficio directamente trabajando en él.
El salto de disciplina lo di en el último año de carrera, cuando me empezó a atraer muchísimo la arquitectura. Tuve la suerte de conocer a un arquitecto que solía participar en muchos concursos y acabar colaborando con él. Así me di cuenta de que era eso a lo que me quería dedicar, pero sabía que para poder hacerlo debía aprender las herramientas principales. Eso me llevó a hacer un máster en el Politécnico de Milán, me pareció que era el sitio idóneo por su historia y por la visión pionera que ofrecía. Además, era muy práctico y divertido, se centraba en proyectar seis workshops con seis estudios muy importantes, cada uno con un perfil y una tipología de propuestas muy distintas entre sí.
ROOM Diseño. – Y dentro de toda esta ecuación, ¿cuál es el papel de Piero Lissoni?
David López Quincoces. – Lo cierto es que entre los profesionales que impartían ese máster se encontraba Piero Lissoni. Cuando terminé mis prácticas, me hicieron una entrevista en su oficina y acabamos trabajando juntos 14 años. Durante estos, me hice socio suyo y director de la parte de arquitectura de interiores. Mientras tanto, en el 2008 abrí mi propio estudio en paralelo. La figura de Piero ha sido para mí la de un mentor, un hermano, un padre. Me ha dado una gran oportunidad, me ha enseñado el oficio y me ha abierto las puertas a las empresas del diseño.
ROOM Diseño. – ¿Qué es lo que te hizo dar el paso para adentrarte en el mundo del diseño de mobiliario?
David López Quincoces. – Llegué al diseño industrial por interés y por pasión. Nunca me había planteado hacer un objeto porque en el estudio de Piero me encargaba de la arquitectura de interiores, pero veía lo que pasaba. También había un fuerte componente de diseño de piezas ex profeso en los proyectos grandes que llevábamos, como hoteles de 5 estrellas en diferentes partes del mundo. De esa forma empezó a interesarme y me lancé al barro intentando diseñar. Eso me ha llevado por un recorrido bastante difícil donde hacía falta mucha perseverancia. No es un mundo fácil, al contrario. Es una curva muy lenta y muy paulatina que, una vez coge inercia, ya crece. Con el tiempo, esa perseverancia y la demostración de que tus productos funcionan te ayudan a crearte un espacio en este ámbito poco a poco.
Living Divani. Ligereza e identidad sostenible
ROOM Diseño. – Aterrizando en la marca Living Divani, ¿cómo se lleva a cabo el proceso de trabajo? ¿Se parte de un briefing o se establece otra metodología a la hora de plantear nuevos diseños? ¿Existe una conciencia ecológica en la selección de materiales y en sus mecanismos de fabricación?
David López Quincoces. – En mi caso, ha sido siempre un proceso muy fluido y natural. En algunas ocasiones he sido yo quien ha llegado con una idea; en otras, la firma exponía una necesidad que debía ser resuelta. También ha habido momentos en los que hemos dado con un diseño completamente distinto al que teníamos pensado. Al principio, empecé con productos mucho más contenidos y pequeños hasta dar cabida a otros de mayor envergadura, como sofás —que para Living Divani es el code business— o sistemas de librerías como Sailor. Todo ha ido creciendo en confianza en todos los sentidos.
Con el tema de los procesos de fabricación, en Living Divani existe una lógica completamente sostenible que se defiende desde un punto de vista de calidad. Nosotros no diseñamos algo que sea tendencia o con una temporalidad muy breve que pueda aportar un gran beneficio momentáneo. En mis trabajos busco siempre hacer mobiliario que, a pesar del paso del tiempo, siga siendo tan útil como el primer día. En esto tienen gran peso los materiales empleados porque acaban cogiendo pátina y profundidad. Eso es lo que conduce a una sostenibilidad real: concebir una pieza que no vas a querer tirar nunca.
ROOM Diseño. – Y durante esta década junto a la firma, ¿cómo ha sido su evolución y de qué modo ha influido esto en los diseños que has realizado para ella? ¿Cuáles son las líneas esenciales que se han mantenido?
David López Quincoces. – Es posible que su valor más fuerte sea una visión estética tan clara, que durante el tiempo se ha mantenido en sintonía con mis propios valores. Creo que su estrategia no ha cambiado en el curso de estos 10 años, sino que ha continuado una evolución con una dirección muy coordinada y pura en sus colaboraciones con distintos diseñadores. Ha conservado esa visión de ligereza, calidad y unos rasgos que no son perpetuos, pero sí los mismos desde el principio hasta hoy. Esto es algo que falta bastante en las empresas del sector, hay pocas que tengan una identidad tan fuerte y tan fiel a ellas mismas. Living Divani es una de las pequeñas joyas del design italiano que demuestra una gran coherencia y un gran sentido para mí.
ROOM Diseño. – Hablemos de la colección Era, una de tus amplias aportaciones para Living Divani. ¿Cuáles fueron las inspiraciones detrás de esta serie de mobiliario tan completa? ¿Qué materiales han sido determinantes para darle forma? ¿Crees que existe una narrativa común en torno a las distintas piezas que la integran?
David López Quincoces. – Diría que el aspecto más reseñable de Era se halla en la linealidad y en la levedad de sus elementos: es la reducción al máximo de la estructura. Empezamos con las mesas y el objetivo era resaltar la ligereza en 8 mm de HPL con unos 10 mm de espesor en el hierro barnizado; además de la introducción de un poco de color, que es una cosa que en Living Divani no existía mucho. Era es un trabajo de síntesis, de quitar más que de añadir hasta llegar al límite y a la esencia.
ROOM Diseño. – Además de eso, Living Divani es capaz de trazar hábitats tanto dentro como fuera del hogar. ¿Qué rasgos reivindicas a la hora de diseñar colecciones outdoor?
David López Quincoces. – Yo no creo tanto en el outdoor e indoor, en esa línea que hay entremedias. A mí me gustaría tener un exterior que me hiciera sentir como si estuviera dentro de casa, tanto por el confort como por la familiaridad con el objeto. Siempre viene bien un poco de experimentación y juego en este terreno, por eso creamos Kasbah, la primera colección en madera. En todos los trabajos outdoors, la elección de materiales está muy estudiada: desde la calidad del tejido, al metal que vas a utilizar o la elección de un barniz especial. Tienes que tener una investigación técnica para que el mobiliario pueda cumplir su misión fuera del hogar.
Balance y durabilidad para el diseño futuro
ROOM Diseño. – De toda tu producción para Living Divani, ¿cuál seleccionarías como la pieza más representativa de tu ideal estético y funcional?
David López Quincoces. – Ninguna. Soy una persona que siempre busca pasar a lo siguiente, al nuevo reto, al nuevo proyecto. Me interesa continuar, crecer y hacer más. Cada pieza tiene su parte de historia y su punto, pero no tengo ninguna favorita. Me gustan todas y a cada una la aprecio por lo que ha sido, pero no me quedo arraigado.
ROOM Diseño. – Actualmente estamos atravesando una crisis importante de recursos, lo que nos lleva a reflexionar hacia dónde se dirige el mundo del mobiliario de cara al futuro. Con esto en mente, ¿cuál dirías que es el principal desafío que está enfrentando el diseño durante esta década de los 20? ¿Qué predicciones puedes hacer de cara a los años venideros del siglo XXI?
David López Quincoces. – Yo espero que la gente aprecie más el esfuerzo que hacemos la gente del sector para elevar la calidad y la experiencia de vida. Que la valoración por las cosas bien hechas esté más presente y tenga más fuerza. Los valores deben cambiar y el buen diseño te lo hace ver: lo haya hecho uno de la Bauhaus, un modernista, un Gio Ponti o un Castiglioni. Al final, lo esencial es que el buen mobiliario debe poder usarse de aquí a veinte años.
ROOM Diseño. – A propósito de eso, ¿como diseñador consideras necesario actualizar el mobiliario icónico para ajustarlo a los nuevos tiempos o mantenerlo como antaño?
David López Quincoces. – Creo que todo reside en la capacidad de combinar y de crear proyectos donde los iconos tengan una dialéctica y un sentido. No hay que decir no a los iconos, sino saber usarlos transversalmente. El balance es siempre la mejor respuesta.
