Hay cierta serenidad en descubrir espacios turísticos como el último proyecto hotelero de Ludwig Godefroy. Lejos de toda pretensión, en Casa TO el retiro vacacional se abordan desde una perspectiva propioceptiva, un viaje que nos invita a reconectar con nosotros mismos.
El brutalismo asceta de Casa TO
En las inmediaciones de Puerto Escondido —un tranquilo pueblo surfista en la costa del Pacífico de Oaxaca, México— se encuentra el hotel boutique Casa TO, inspirado en los primitivos templos oaxaqueños. A través de una lectura contemporánea de estas estructuras religiosas, Ludwig Godefroy ha creado nueve suites cavernosas como oasis de elegancia austera y monumentalidad íntima. Un ejercicio fundamentado en la materialidad escultural del hormigón visto y en el que combina el modernismo tropical con la arquitectura brutalista.

El mexicano ha depurado un lenguaje constructivo donde emplea dicho material —que domina a la perfección— como su caligrafía fetiche, un material. La atmósfera de la Casa TO se concretiza por medio de una sintaxis sin decoración, de un ascetismo rotundo basado en una obsesión casi infinita por la geometría sencilla: círculos y triángulos que se repiten en todas las superficies, a veces como elemento sustraído y, otras, de forma más evidente.


Un hotel brutalista que busca del jardín perdido
En el corazón de Casa TO, una lámina de agua lo domina todo extendiéndose a lo largo del edificio, integrando la recepción y el área del salón a lo largo de ella. Y es que, en este viaje hacia el interior que nos propone Ludwig Godefroy, los recursos naturales como el agua y la vegetación representan esa búsqueda del paraíso perdido.

Desde cada una de las habitaciones se permite el acceso a un jardín cerrado: una reinterpretación bastante tropical del hortus conclusus, un rasgo que como europeos tenemos incorporado en nuestra tradición grecorromana. Sin embargo, desde la perspectiva del otro lado del charco, quizás pueda resultar algo bastante novedoso por ser la espesura selvática más indómita.


El recinto doméstico de Ludwig Godefroy
El espacio tiene una estructura secuencial sencilla desde el punto geométrico del proyecto, aunque bastante compleja a nivel experiencial; de hecho, las paredes transversales van segmentando el ambiente diáfano en secciones más íntimas y privadas. La predominancia del hormigón expuesto que coloniza toda la propuesta se suaviza mediante la elección de muebles a medida por artesanos locales, de tapetes coloridos y de abundantes plantas en macetas. Los retiros privados en las seis suites del nivel bajo y las terrazas con piscinas en las del nivel superior añaden encanto sereno a las habitaciones.


Con ello, Casa TO se puede entender como una concatenación de planos de béton brut que van constituyendo un recinto doméstico. Los paramentos verticales perforados y muy debilitados apenas pueden contener una espacialidad difusa, donde el acto de habitar se relaciona más bien con la exploración topográfica del suelo. A pesar de esta fragmentación, Ludwig logra conectar el interior —por medio de amplias aberturas— con los exuberantes jardines o vistas del cielo, facilitando, además, la ventilación natural de estas estancias.

En este enlace puedes leer sobre otras sorprendentes casas de Ludwig Godefroy.
Ludwig Godefroy es un arquitecto mexicano graduado en la Escuela de Arquitectura de Marne-la-Vallee en París. Fundó su propio estudio de arquitectura en 2011 después de trabajar en estudios de arquitectura como Rem Koolhaas/Oma, Miralles y Tatiana Bilbao.