La mitológica Sedna, diosa Inuit de los infiernos marinos, ha servido de punto de partida a la diseñadora Anne Sofie Madsen para la creación de su colección Fall Winter 2012, presentada en la Aurora Fashion Week rusa. Mitad humana, mitad esqueleto, la deidad es la creadora de todos los animales marinos y detesta a los humanos. Madsen recoge esta filosofía y castiga a los hombres (en este caso, a las mujeres) atrapándolas bajo tallas de marfil salpicadas por espuma blanca de gasa, igual que Sedna sanciona al pueblo esquimal con tempestades o fatales jornadas de caza.
Este espíritu vengativo que habita la región de Adliden, enjuicia las almas de los muertos bajo las aguas del Ártico, por lo que no sorprende que la creadora cubra de luto -con concesiones al azul petróleo y al blanco hueso- alguna de sus prendas, ni que estampe sobre ellas grafismos de almas errantes.
Una colección dura, donde destacan los prints que dibujan fuertes corrientes de arena ensuciando las prendas con gotas descoloridas y detalles de cuerda y abalorios. Anne Sofie Madsen acentúa la dureza de su propuesta mediante siluetas victorianas masculinas, un juego de volúmenes y los materiales metálicos que recuerdan la fuerza de la tierra arrastrada por las olas.
Una apuesta guerrera que a veces se tercia cálida y romántica mediante el uso del punto, para recordarnos que Sedna, antes de convertirse en una despiadada fiera, fue una bella joven que apostó por un amor mágico y que, al intentar huir de él en barco, quedó sepultada bajo las aguas del Ártico para siempre.
