En una de las orillas del río Ness encontramos una pequeña estructura de piedra que se posa de manera discreta sobre el agua. Con un trazado ligeramente curvo, el mirador The Gathering Place ha sido diseñado por el colectivo artístico Sans Façon junto a los arquitectos KHBT para conectar las personas con el arte, la arquitectura y la naturaleza.
La unión entre arquitectura y paisaje de Escocia
Probablemente Escocia sea el país británico con la mayor riqueza paisajística. Imponentes montañas con frondosos bosques, antiguos castillos, salvajes playas y profundos lochs colonizan su geografía. En uno de estos privilegiados parajes, concretamente en la región de Inverness, se ubica este volumen que levita sobre el río Ness.
Con un trazado firme y levemente curvo, la plataforma sirve como “acceso” al río. Un armazón que se transforma de banco a camino y, finalmente, a muelle o mirador. De este modo, el proyecto no se entiende únicamente como un hito arquitectónico o escultórico, sino también como un sitio de reunión y contemplación del entorno para lugareños y visitantes.
El mirador como punto de encuentro
La mayor bondad de este tipo de construcciones es, precisamente, la no construida. En este caso se trata del potencial dinamizador que lleva implícita la propuesta: unir a las personas con la naturaleza y actuar como punto de encuentro. Esto es algo significativo de lo que sus creadores hablan al describir las intenciones de su pieza: «Enlazar la ciudad con el río, dibujar sus historias, generar un sentido de pertenencia y finalmente crear un acceso a la ribera”.
Al estimular la dimensión social de los espacios públicos inculcamos a los usuarios el hecho de cuidar y proteger el medio natural. Además, ampliamos los lugares de reunión que poseen pueblos y localidades, comúnmente relacionados con áreas edificadas.
Una arquitectura flotante con huella mínima sobre el entorno
Con respecto al aspecto formal, The Gathering Place ha tenido muy en cuenta el ambiente que la circunda. Con una presencia completamente horizontal, se asegura no dominar el hábitat, sino ser parte de él y disfrutar de unas visuales despejadas sobre el agua.
Durante el proceso de diseño se pensó en los habitantes de la zona, que participaron activamente en el desarrollo del planteamiento. La estructura se calculó para tener el mínimo impacto sobre la fauna y flora del río y se trabajó de manera colaborativa con entidades asociadas a la protección del entorno. En cuanto a la materialidad de The Gathering Place, se escogió la piedra arenisca de Clashach. No solo por su belleza natural, sino por ser un elemento constructivo de origen local que se puede extraer en la región.
En este enlace puedes conocer otro mirador frente al fiordo de Ilulissat.
En una de las orillas del río Ness, en la región inglesa de Inverness.
Como elemento constructivo y de acabado exterior se ha utilizado la piedra arenisca local de Clashach.