La diseñadora holandesa Marjan van Aubel ha creado una lámpara de techo con el apoyo de la plataforma de crowdfunding Kickstarter. El proyecto, llamado Sunne, gracias a las placas solares que lo envuelven y a su batería integrada, recopila energía durante el día para imitar hasta tres tipos de atardeceres cuando comienza a caer la noche.
El compromiso con las lámparas de techo
Cuando nos hacemos con nuevos objetos —en esta ocasión con una luminaria colgante— uno de los principales inconvenientes que retrasan su instalación es la labor de hacer las conexiones necesarias para que funcione. Ubicarla en el espacio es una tarea más sencilla. Es por eso que, en este ejercicio, no solo se adquiere una pieza, sino un compromiso con ella. Conlleva un montaje y con ello varias pruebas, cables o baterías, que quitan tiempo y energía para disfrutar de lo que hemos obtenido.
Eliminar finalmente esta primera fase —tan tediosa muchas veces— es sinónimo de evolución, y un gesto que motiva la compra de nuevos útiles. Sunne, además de sus muchas otras características positivas, empieza por aquí.
El atardecer y las placas solares
Las células fotovoltaicas de la lámpara de techo Sunne permiten guardar, junto a su potente batería, la claridad del día para irradiarla automáticamente al anochecer en sus tres modos: Sunne Rise, Sunne Light y Sunne Set. El lado que recibe la luz es el que está orientado directamente a una ventana, y el que lo emite se proyecta al interior que se quiere iluminar.
El revolucionario trabajo de la holandesa, en colaboración con el Energy Research Center de los Países Bajos, busca normalizar este tipo de tecnología en los hogares. Los paneles solares son cada vez más accesibles, y como la diseñadora demuestra en su planteamiento, es posible hacer uso de ellos aun viviendo en casas pequeñas.
El diseño de la lámpara de techo Sunne
Otra de las cosas que hace de la lámpara de techo Sunne una propuesta especial es su diseño minimalista. Todo su sistema se traduce en un oblongo de 15 x 85 x 4 cm suspendido por dos cables de acero. Parecida al modelo Altea 500 LED de Astro Lighting, la lámpara está inspirada en el horizonte. Por eso, sus estudiadas líneas simulan ese límite en el espacio. Las pantallas exteriores que comprenden la tecnología van unidas por un marco de aluminio anodizado que almacena, además, los botones de configuración de la pieza.
La campaña de crowdfunding de Kickstarter ha finalizado con éxito y los usuarios que la hayan apoyado comenzarán a recibir sus recompensas el próximo verano. Eso sí, tendrán una Sunne aquellos mecenas que hayan contribuido con un mínimo de 750 euros.
La buena comunicación
En el caso de firmas con un solo producto, la comunicación es clave para darlo a conocer y forjar un universo que atraiga al consumidor. Los famosos chocolates MAST de los Mast Brothers o los hidrogeles HAAN solo fabrican una única cosa: la misma tableta de chocolate y el mismo gel respectivamente. ¿Cómo consiguen tener tanto éxito? Se genera un mundo gráfico alrededor que impulsa no solo esa venta concreta, sino un discurso y un estilo de vida también muy seductores.
La lámpara de techo Sunne hace esto. Con su branding, fotografías, diseño gráfico y packaging se desarrolla una fuente inagotable de recursos con los que jugar y dar movimiento a un proyecto que solo acaba de despegar.
En este enlace puedes conocer más propuestas de iluminación
Una lámpara de techo diseñada por la holandesa Marjan van Aubel. Gracias a las placas solares y a su batería integrada, guarda la luz del día para emitirla al anochecer.
Su creadora quiere demostrar que aprovechar la energía solar es algo que podemos empezar a hacer todos. No es necesario tener una casa grande para beneficiarse de este recurso. El cambio es posible.
A través de una campaña de crowdfunding en Kickstarter.
750 euros cada unidad.