El estudio del arquitecto Héctor Ruiz Velázquez ha rediseñado el espacio de gradas, lounge y zona de baños de Starlite Marbella, impregnándolo todo de un concepto en el que son expertos: la osadía y el futurismo arquitectónico.
El sueño futurista de Héctor Ruiz Velázquez
Un lugar onírico para sentir los sueños de manera realista. Una representación espacial de un oxímoron entre ensoñación y vigilia. Y toda esa magia impregnada de un componente principal: el movimiento. De ese modo explica el estudio de Héctor Ruiz Velázquez su último trabajo en el recinto Starlite de Marbella, al que definen tras su intervención como “un certamen que gira en torno al dinamismo, al tránsito lúdico que genera su entretenimiento por sus dos escenarios, conectados en esta ocasión por una incisión que rompe y unifica al mismo tiempo”.
Continuando con este imaginario, la zona VIP de los palcos ha sido ubicada en un ambiente elevado, con una puesta en escena que recrea una cueva roja luminosa de toques dorados y negros, para hacer match con la imagen corporativa de Starlite. Junto a estos se ubican los baños más impactantes de todo el complejo, que nos reciben con una entrada circular. Inspirada en un sol dorado, esta nos envuelve con el mejor material: la colección de metales de Formica. Así lo vemos en el interior de esta estancia la cual está recubierta con “techos de aguas metálicas doradas como un líquido que desafía la gravedad y amplifica el ambiente con los efectos de espejos en las paredes y detalles magníficos, como la colección de AX ONE de AXOR con sus grifos de oro pulido.”
Gastronomía y emoción en Starlite Marbella
Tres propuestas gastronómicas conviven en el área con elementos en común, como las curvas en sus barras y los arcos superpuestos, pero con una estética individual diferenciada. En el caso de Tanabata, esta se presenta como una alegoría japonesa de la fiesta de las estrellas y prueba de ello son sus 90 farolillos. La decoración textil de esa zona forma parte de la colección Geography que el propio Héctor firma para la marca Ecoplen. Un tejido de altas prestaciones técnicas que se convierte en un imprescindible para este tipo de lugares en cuanto a higiene y olores se refiere.
Sandra’s Bar responde a un estilo más corporativo con el beige y el dorado como eje: una construcción clásica y elegante propia de los clubs más lujosos. Haciendo un guiño al mundo egipcio con sus palmeras doradas, de nuevo los textiles de Ecoplen lo cubren todo. Y, por último, Loft, donde el art déco se mezcla con la arquitectura futurista tan dominada por el equipo de Héctor Ruiz. Pasión, amor, furia, felicidad, poder o nobleza son solo algunas de las emociones que han querido transmitir con el uso del rojo, que capta nuestra atención y estimula nuestros sentidos. Una escenografía muy cinematográfica erigida con laminados de Formica y tejidos de Ecoplen.
Una copa invertida nos da la bienvenida a una segunda zona de aseos, que con sus siluetas y patrones nos adentran en un universo que baila entre el ying y el yang a través de cubiertas con aguas metálicas doradas o la grifería Starck Organic de Axor. Sin duda, Marbella brilla más que nunca gracias a la exquisita intervención del arquitecto Héctor Ruiz Velázquez, que nos hace vibrar al ritmo de la música envueltos en un diseño inspirador.
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Formica, Ecoplen y Axor.