Lukstudio está compuesto por un equipo internacional de creativos con sede en Shanghái. Con el leitmotiv de que “todo es posible”, en los últimos años han afrontado algunos de los proyectos más innovadores en el ámbito del retail, combinando para ello tradición (tan importante en China) e innovación.
Desde la premisa de la experimentación con materiales, luces y sombras, nace Lilong Modular, la nueva boutique de Chuang x Yi: un espacio que quiere ser amplificador de señal para jóvenes diseñadores de moda chinos. Con una superficie de 150 m, está delimitado por armazones arquitectónicos, que rozan el concepto pop art store por su versatilidad y movilidad. Hablamos de estructuras modulares desmontables y, por tanto, fácilmente instalables en otra ubicación.
Detrás de estas líneas geométricas hay una voluntad por hacer del interior del establecimiento un guiño a la arquitectura local de Shanghái. Porque estas estructuras-estantería y su distribución en la tienda son una referencia a los lilongs: barrios tradicionales de Shanghái donde los edificios se organizan en pequeños callejones y cuyos diseños responden a las necesidades de resolver los problemas de escasez de suelo en la ciudad china. Básicamente, Lukstudio han convertido el paisajismo urbano de esta capital cosmopolita en un sofisticado espacio comercial. Un planteamiento que ya descubrimos hace tres años en la Ciudad Doméstica de Javier Peña, aunque el arquitecto español, en su caso, llevó el trazado urbanístico de Logroño a entornos más domésticos.
Pero al margen de este juego de alusiones urbanas, o gracias a él, Lukstudio ha concebido un lugar abierto y dinámico, donde la ropa se expone de un modo integrador, creando volúmenes dentro de las estanterías metálicas. Tal es el grado de fusión, que bien podríamos confundirlo con un museo en el que los textiles enlazan unas formas con otras y nos invitan a desear sin tocar.