En uno de los mejores laboratorios urbanísticos de Europa, el distrito 22@ de Barcelona, se encuentra Jungle: un nuevo espacio de trabajo para el grupo PS21. Un remanso de paz ideado por el equipo de Lagranja Design que acoge una selva urbana llena de posibilidades para sus habitantes.
Una selva urbana destinada a la cocreación
A primera vista, en Jungle apreciamos un escenario silencioso y manso. En este oasis funcional reina el pladur sin pintar, el yeso, el acero galvanizado y el metal: unos materiales que nos acercan más a un territorio industrial que a un paraje natural. Eso sí, esta selva urbana sin puertas, silos o jerarquías es, ante todo, sostenible y ecoeficiente: el equipo de Lagranja ha utilizado los recursos mínimos, componentes sostenibles, reciclados y de proveedores locales
Vemos que sus techos doblemente altos refugian salas diáfanas, estructuras modulares, zonas de trabajo, comedor, taller e incluso una gran grada para ponencias. Parece que cada mesa, asiento o lámpara espera expectante para cumplir correctamente su papel. La escalera de caracol se retuerce varios metros como si se tratase del cuerpo de un felino. También sorprenden los tubos, los cables y las cajas, que nos recuerdan a las más largas y exóticas serpientes. Además, los destellos amarillos y rosas flúor empleados en el mobiliario añaden una nota rebelde y punk que otorga personalidad al proyecto. La luz natural invade cada rincón del coworking, aunque los focos cálidos en áreas más oscuras y privadas otorgan un contraste de lo más cautivador al paisaje.
Gráfica e interiorismo un mix de Agencia Mucho y Lagranja Design
Asimismo, en toda la propuesta resalta el desarrollo de la identidad gráfica que ha realizado la Agencia Mucho. Y es que el ejercicio de interiorismo llevado a cabo por Lagranja se ve engrandecido gracias al logotipado del propio nombre del coworking, en un pequeño sistema de marca que nace a partir de la construcción de las propias letras. La tipografía que representa la palabra JUNGLE se inspira directamente en el estilo suizo de los años 50, por lo que toma unos contornos y una configuración muy en sintonía con la arquitectura planteada.
Estos trazos, sencillos y rectilíneos, sellan las pieles y superficies de las cajas de la oficina. Y, a raíz de esta acción, se desgrana un universo gráfico versátil que da pie a jugar con los propios paneles divisorios de salas y paredes, pudiendo agujerear estas formas y favorecer así la sensación de cooperación y cocreación entre equipos. Una sede perfecta para grupo PS21 por todo lo que implica a nivel de confort y productividad, ya que, como ellos lo definen, es “un espacio pensado para encender la colaboración y la creatividad. Un entorno ágil, práctico e interactivo. El canvas que escenifica nuestra cultura”.
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En el distrito 22@ de Barcelona.