El estudio de arquitectura emergente Worrell Yeung ha presentado su nueva vivienda unifamiliar: un granero típicamente americano, actualizado a través de una estética puramente minimalista.
La renovación de una granja americana
Se puede hablar un lenguaje local con una voz internacional, combinar los dos idiomas a la vez con perfecta fluidez y que la mezcla resulte exitosamente armónica. Así lo ha demostrado el joven estudio de arquitectura neoyorquino Worrell Yeung, quien aúna el estilo agrícola americano y la corriente del minimalismo en un mismo lugar: una granja de vanguardia como último proyecto residencial.
Ubicada en el pueblo de North Salem (Westchester, el Upstate de Nueva York), esta nueva casa unifamiliar hace gala del minimalismo a la par que recupera la icónica edificación estadounidense. En su versión actualizada, lo autóctono entabla un diálogo con una estética despojada, sintética y esencial, sin rechazar por ello lo propio de la región: la clásica silueta sencilla con su tejado a dos aguas. En otras palabras, una construcción vernácula transformada que reivindica la permanencia de un entorno a la vez que lo renueva.
La apuesta minimalista
Con obras anteriores en la misma línea, la propuesta de Worrell Yeung consiste en tres estructuras unidas que ejercen un perfeccionado juego. Uno entre la verticalidad de los listones y la horizontalidad del armazón alargado. En su apariencia exterior, cada una de ellas presenta una cubierta de metal oscuro cubiertos de madera de ciprés en verde oscuro. Una elección cromática que traduce la sobriedad de su apuesta minimal.
“La paleta de la fachada se inspiró en los graneros envueltos en musgo, por lo que se nos ocurrió un tinte personalizado que adopta diferentes lecturas según la luz y la estación, al mismo tiempo que imbuye el carácter de la madera de ciprés”, dice Yeung. El equipo consideraba importante que el diseño se integrase con el medio, por lo que no solo explora el paradigma arquitectónico de esa área, sino que también apoya su trabajo en el de RAFT Landscape, quien ha colaborado en el paisajismo de las zonas verdes que lo rodean.
La introducción de geometrías en la superficie plana de los bloques —cuadrados y rectángulos principalmente— viene dada por el cristal. Este último descubre un interior cálido y apacible, en donde prima la sensación de amplitud por sus techos altos, que respiran bañados por la luz natural. Y si bien por fuera todos los volúmenes ofrecen un guiño al característico granero, dentro los distintos colores y los detalles de los materiales aseguran que cada uno tenga su propio carácter.
«No queríamos una experiencia monótona de pasar de un edificio oscuro al siguiente», comenta Yeung. De esta manera, la madera de abeto cobra especial protagonismo en su disposición y tonalidades. Junto a ella, los tonos terracota, la cerámica en pizarra o los cimientos de piedra original de 1800 proporcionan una variedad y riqueza en texturas. Todo ello sumado a las grandes aberturas que facilitan vistas panorámicas hacia el estanque y el jardín.
Lo complejidad de lo sencillo
La casa es a la vez simple y compleja. Los contornos a dos aguas son familiares, pero también poseen diversas capas en el modo en que interactúan con el sitio o entre sí, generando espacios que reformulan el enclave. El resultado ejemplifica la fascinación de los integrantes de Worrell Yeung por crear sistemas sofisticados que requieren ingenio y colaboración pero que parecen bastante asequibles. Un interés por expresar el volumen arquitectónico a través de una simplificación de los elementos, capaz de componer un diseño elegante y minimalista que una el refinamiento y la relajación hogareña con lo vernáculo.
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Fundado en 2014 por Max Worrell y Jejon Yeung, su práctica sintetiza sistemas y necesidades complejos en soluciones conceptuales claras. Trabajando en varias escalas y tipologías, desde el espacio público hasta el residencial y cultural, aborda cada proyecto como una oportunidad para crear un trabajo que se centre en la función y sea duradero. Su intención es crear una arquitectura que mejore la vida de las personas y transforme positivamente las experiencias de sus usuarios y las comunidades.