El estilo consiste en encontrar un camino expresivo y llevarlo hasta las últimas consecuencias. Y los hermanos Campana lo han conseguido. Estos atletas del material de desecho y de los productos naturales, han logrado un personal discurso creativo mediante objetos (sofás, armarios, sillones…), que con los años han ido abandonando la estética “favela” de la que partieron, para ir sofisticándose cada vez más.
Los bloques de madera, el cuero arrugado, los cojines irregulares o las estructuras de alambre se han convertido en marca de la casa, en el sello con el que estos brasileños reinterpretan el mobiliario cotidiano, en un ejercicio que contrapone la humildad de algunos de estos materiales con el resultado final de la pieza.
La rafia como cortinaje ya la vimos en el armario Cabana (2010). Los cojines multiforma son la clave del sofá Cipria (2009). Mientras que los tablones como soporte de un mueble, los descubrimos en la silla Favela (2003). Pues bien, ahora se han transformado en cama. Lo que pone en evidencia cómo el tándem Fernando-Humberto sabe someter cualquier objeto a las directrices creativas que ellos establecen. En fin, en eso consiste el estilo.
