Casa en Lavapies para un poeta
En el barrio de Lavapiés de Madrid, dos leyendas marcan el nombre de la calle Mesón de Paredes. La primera tiene que ver con el dueño de un mesón que, celoso de su mujer, agujereaba las paredes para poder espiar su comportamiento. La segunda con una mesonera de homónimo apellido que al parecer inventó a finales del XIV el bocadillo, entonces emparedado, para nutrir a los viajeros camino de La Mancha.