Con casi 200 m2 distribuidos en una sola planta, el piso cuenta con cocina-comedor, salón, tres dormitorios, cuatro baños y dos terrazas con espectaculares vistas al mar.
La diseñadora Elena Navarro, fundadora del estudio de interiorismo Trestrazos, ha llevado a cabo el proyecto de interiorismo y decoración de este espectacular piso de casi 200 m2 en el simbólico edificio Antares de Barcelona. La privilegiada ubicación, con magníficas vistas al mar, y la filosofía de vida de los propietarios han inspirado un diseño minimalista y luminoso que, a su vez, es cálido y acogedor.
Elena Navarro, diseñadora: “La casa presenta una imagen cosmopolita, moderna y chic, en sintonía con el estilo del entorno. Cada detalle ha sido pensado para crear un ambiente unificado y envolvente. La transición entre los espacios fluye, es serena, cómoda, apetecible. La personalizada estética invita a gozar y saborear cada rincón”.
En este proyecto, los colores seleccionados tienen una función clave para crear una vivienda acogedora y con carácter. Los blancos y neutros hablan de serenidad, luminosidad y calma; los tonos piedra aportan estabilidad, rigor y naturalidad; los óxidos y dorados introducen calidez y elegancia; y el burdeos y mostaza integrados sorprenden, dando carácter y contraste al conjunto. Los elementos decorativos y las obras de arte presentes no solo unifican los ambientes, sino que hacen realidad una atmósfera envolvente y un verdadero diálogo visual.
Cocina y comedor, creados para sorprender
La cocina-comedor de concepto abierto ha sido diseñada con una estética original y rompedora para impresionar desde el primer momento. Enmarcado por piedras veteadas y un espejo envejecido, que aporta profundidad y carácter, se ha creado un rincón de bar con estantes de cristal e iluminación propia, conectando visualmente este espacio con el siguiente eslabón de la vivienda: el salón.
La zona de cocina cuenta con una gran isla curva central que domina la estancia dándole movimiento y modernidad al espacio; la isla está flanqueada por una encimera y amplios armarios.
“Esta amplia zona está integrada con el comedor, donde destaca una imponente mesa de mármol Tundra Grey con maravillosas vetas en tonos grises y beige, y pie metálico en acabado óxido. Sobre ella, hemos colocado dos icónicas lámparas de Louis Poulsen que, como un guiño al entorno, nos recuerdan a la estructura del propio edificio en el que nos encontramos”, afirma Navarro.
El buffet, hecho a medida de roble tintado y hierro lacado, enmarca una sorprendente obra de Lidia Masllorens, cuya mirada nos sigue y nos atrapa desde que accedemos a esta zona.
Arte y geometría en el salón
Envuelto por enormes ventanales, el salón, con su forma trapezoidal, supone un espacio envolvente y orientado a las vistas. Un sofá de Edra, dinámico, semicircular y en color piedra, preside la estancia. La trasera de la pared cuenta con una singular estantería de hierro negro, diseñada por el propio estudio.
Frente al sofá, y sobre una alfombra de seda, la mesa de centro circular, en tono ocre y con superficie de espejo envejecido, completa el espacio junto a dos butacas Cassina, tapizadas en color burdeos. Todo este conjunto se orienta, por un lado, hacia las vistas al Mediterráneo y, por el otro, a la zona de la moderna chimenea de hierro hecha a medida. Las obras de Guillem Nadal, Alicia Gimeno y Atelier Plateau dan carácter a estas paredes, conteniendo el espacio y aportando un juego de texturas, sombras y contrastes que transmiten personalidad y elegancia.
Este salón no sólo es llamativo por su original geometría y abundante luz natural, sino que ha sido ideado para ofrecer una experiencia sensorial completa y única.
Un dormitorio principal, un refugio de paz
La completa y detallada composición del dormitorio principal hacen de esta estancia un lugar exclusivo, cautivador y elegante, donde cada detalle ha sido meticulosamente pensado. Con espectaculares vistas al mar y rodeado de ventanales, se distingue por un diseño que evoca paz y confort.
Los tonos verdes y tierra de la decoración se fusionan con las paredes y techos blancos. La zona de cama, ataviada con textiles naturales, destaca por un cabecero que abarca toda la pared, una alfombra de bambú y mesitas de noche de madera maciza.
Frente a la cama, un elegante espejo envejecido, con diseño patchwork, añade luminosidad y profundidad al espacio, acompañado en su base por una cómoda que combina cristal y madera oscura, integrándose con el pavimento. La iluminación resalta aquí con lámparas colgantes, alargadas y de estética minimalista, que parecen flotar sobre la cómoda. La icónica butaca Eames Lounge, tapizada en blanco roto para hacerla más ligera, invita a la lectura y al descanso.
Sobre las paredes, arte: un cuadro de Coohuco Studio, hecho a medida para este proyecto, y una obra minimalista de Atelier Plateau que aporta relieve y materialidad.
Segundo dormitorio, esencia barcelonesa en estado puro
Da la bienvenida una zona de lectura, protagonizada por la icónica butaca Barcelona y acompañada por una fotografía de la emblemática biblioteca Casanatense de Roma, de la galería YellowKorner.
La habitación se viste con tonos tierra y burdeos, un cabecero hecho a medida y papel pintado texturizado. A ambos lados de la cama, redondas mesitas de piedra descansan bajo esbeltas lámparas colgantes con medio globo de mármol. En el suelo, una alfombra a medida en tonos tierra, con un sutil efecto de agua.
Las impresionantes vistas y la decoración convierten a este dormitorio en un enclave singular, moderno e inspirador.
Un dormitorio-estudio con armonía y versatilidad
El estudio, accesible desde el salón, se convierte en un espacio polivalente que puede funcionar como despacho o habitación de invitados. La conexión directa con la sala de estar permite que los colores predominantes en el interior, como los ocres y tonos piedra, jueguen un papel esencial en la generación de continuidad y armonía.
Frente a una librería integrada en la pared, se ubica un sofá-cama de textura suave y acanalada, acompañado por una fotografía de YelowKorner. Las curvas del escritorio de madera y la lámpara de metal aportan dinamismo al ambiente.
Bañeras exentas con espectaculares vistas
Entre los cuatro baños de la casa, destacan especialmente los anexos a los dos dormitorios principales.
Con amplias ventanas y una panorámica espectacular, estos espacios cuentan con bañeras exentas, mármol en paredes y suelos, y un halo de serenidad que impregna cada detalle.
Exteriores para el disfrute y la relajación
Las dos terrazas que rodean la vivienda son una extensión del diseño interior, manteniendo esa sensación de calidez y comodidad que impregna toda la casa.
Las terrazas cuentan con vistosas y resistentes plantas naturales, mesas para exterior, camas y pufs tapizados. El espacio se completa con suelo de madera de teca.
–
Fotografías ®Lupe Clemente
- Estudio
- Trestrazos Interiorismo
