Remplazando cualquier palabra mediante el signo de exclamación. Así es como el estudio japonés Nendo evita condicionar la vivencia de sus propuestas. La motivación creativa de Nendo es hacer surgir esos pequeños relámpagos de deslumbramiento que, antes que con palabras, expresaríamos con más precisión y plenitud simplemente así: “!”.
“Hay muchos momentos ‘!’ en nuestro día a día, pero no los reconocemos; e incluso, cuando lo hacemos, tendemos a resetear inconscientemente nuestra mente y olvidarlos. Pero nosotros creemos que ellos hacen nuestros días más interesantes y ricos. Por eso queremos reconstituir lo cotidiano volviéndolo a modelar en algo que sea fácil de entender”. Así habla el fundador del estudio, Oki Sato.
La plaza CoFuFun (prefectura de Nara, Japón) es su primera intervención urbana y se distingue por haber logrado mantenerse en ese propósito: configurar un escenario inesperado que, inmediatamente, se comprende como acogedor y estimulante. Su valor es la claridad, la intensa simplicidad que logra que un área pública de uso lúdico reinterprete, sin ofender ni distorsionar, el carácter solemne que originariamente poseía el territorio donde hoy se encuentra.
La palabra cofun designa unos pequeños túmulos donde fueron sepultados emperadores y emperatrices hace quince siglos. La sutil transformación del nombre, fusionado con la actual palabra fufun, integra el sentido: ese genius loci primigenio y la contemporánea voluntad de convertirlo en un espacio que ocupar de manera despreocupadamente feliz. Esos túmulos fueron la base de inspiración para definir este parque que introduce actividad dentro de una zona urbana que, por largo tiempo, no tuvo uso alguno y que hoy acoge un café, una zona comercial, kioscos, una zona de juegos, un escenario al aire libre…
La plaza está conformada por una serie de enormes estructuras escalonadas, de hormigón, completamente blancas y en forma de disco, que se adecuan a la topografía del solar, donde alternan una cuenca y promontorios. Así, algunas de las estructuras están cubiertas por cúpulas y otras ahondan en el terreno a la manera de un anfiteatro.
Antes que como objetos arquitectónicos, estos cofun están concebidos como piezas de mobiliario. Son escaleras, pero también son bancos para sentarse… La ambigüedad abre al máximo sus posibilidades para que los visitantes exploren y disfruten de cada una de ellas tal y como deseen, y dejarlo explicado en un ‘!’.
