El agua ha sido siempre un escenario de desafíos y conquistas. En ese horizonte azul y profundo, Oris encontró hace 60 años su inspiración definitiva: el reloj de buceo. Hoy, la firma suiza celebra la historia de su legado con el lanzamiento del nuevo Divers Date, una reinterpretación audaz y serena de su clásico Divers Sixty-Five. Esencia de los años 60 con la precisión del siglo XXI.
El primer reloj de buceo de Oris
Durante la década de los 60, mientras el mundo miraba al espacio, otros dirigían su atención al océano: esa vasta profundidad que durante siglos había permanecido inexplorada. Fue en este contexto donde la firma Oris —fundada en 1904 en Hölstein (Suiza)— decidió sumergirse en las aguas del diseño submarino, con el primer reloj de buceo de la marca en 1964. Un modelo que, lejos de ser un simple instrumento, se convirtió en un compañero de aventuras para aquellos que se atrevían a explorar el fondo marino.
Con una caja robusta, una legibilidad impecable y un bisel giratorio unidireccional, Divers Sixty-Five cumplía con las exigencias técnicas e introducía un componente de estilo que lo hizo destacar entre sus contemporáneos. Oris, que hasta entonces había sido reconocida por su fiabilidad mecánica y la producción de relojes asequibles, se posicionó como un referente en el ámbito de la relojería de buceo. El sello suizo, con su filosofía Go Your Own Way, no seguía el ritmo de la moda, lo marcaba. Y así, esta pieza de los años 60 se convirtió en el germen de lo que hoy se celebra con el Divers Date.
El icono de Oris se reinventa
Con el Divers Date, Oris no se ha limitado a reproducir la versión clásica: ha llevado el carácter del Divers Sixty-Five a un nuevo nivel. Este reloj, disponible en tres colores de esfera —negro, azul y beige—, fusiona la nostalgia con la modernidad. Su caja de acero inoxidable ha ganado en robustez y resistencia, pasando de los 100 metros de estanqueidad de su predecesor a los 200 metros de profundidad. Un incremento que no se limita a ser un simple detalle técnico, pues confirma que además de lucirse en la superficie también puede habitar las profundidades.
El bisel giratorio unidireccional ha sido revisado para ofrecer una mayor precisión y durabilidad. Ahora está equipado con un inserto de cerámica resistente a los arañazos y a la decoloración; también el agarre se ha mejorado, permitiendo una manipulación segura incluso con guantes de buceo. Pero el alma de Divers Date reside en su calibre automático Oris 733, que posee una reserva de marcha de 41 horas. El sistema de cambio rápido de correa añade una capa de versatilidad, pudiéndose alternar entre una pulsera de acero inoxidable y una correa de caucho negro, adaptando el reloj al contexto, ya sea en el agua, la ciudad o la aventura.
La conexión con el imaginario visual de los 60 se centra en las esferas y en sus tres tonalidades, que toman su inspiración de la paleta industrial de la época. A pesar de ello, el Divers Date no puede mirarse tras el filtro de la melancolía, más bien con la lucidez de quien sabe que la atemporalidad no está en los objetos, sino en los principios que los inspiran. El mar nunca es el mismo, pero siempre es el mar. Y así ocurre con el Divers Date, porque no importa cuánto cambie su diseño, se perfeccionen sus materiales o mejoras técnicas se le apliquen: su esencia permanece inmutable. ¿No es esa la verdadera grandeza de un icono?
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