La linealidad se ha convertido en el germen de la representación. Aquello que se traza existe, todo lo demás queda en el margen, ajeno a lo corpóreo. Partimos de lo matemático para configurar nuestra realidad; desde el más diminuto esbozo, lo que percibimos está lleno de matices precisos. Las nuevas lámparas de diseño DESK Matrix de Nemo Lighting transmiten esa sintonía, un aura similar a la de una alegoría geométrica que pende delicadamente sobre nuestras cabezas.
Nemo Lighting, una trayectoria repleta de luz
No es la primera vez que Nemo Lighting explora los límites de la arquitectura para plantear nuevas formas de enfrascar la luz. A través de su colección The Masters, resucitó varios clásicos de la iluminación, como la Borne Béton proyectada por Le Corbusier en 1952. De la misma manera, diseñadores actuales también ofrecen su mirada única en la creación de auténticos iconos contemporáneos, entre estos, la lámpara Newton de Andrea Branzi u On lines de Jean Nouvel. Existe en el planteamiento de estas piezas un concepto que aborda el diseño desde una perspectiva exacta. La manzana de Branzi se sostiene atentando contra la gravedad, mientras que los paralelogramos de Nouvel se superponen para moldear una obra pintada por el mismísimo Mondrian.
DESK Matrix. Lámparas de diseño con tintes geométricos
No hay en la proyección de Nemo Lighting un rasgo indefinido. Todo se basa en la proporción armónica de las partes, ya sea en las curvas o en la rectitud. DESK Matrix aumenta la serie de Linescapes de la firma italiana, pero desde un punto de vista riguroso y estrictamente poligonal. La delgada figura rectangular y cuadrangular de las luminarias aporta a cualquier contexto confort y estética. Su versatilidad decorativa es, de hecho, su gran fuerte junto a su cuerpo de iluminación de alta tecnología. Oficinas, entornos contract, hogares… cualquier atmósfera puede ser delimitada por la presencia de estos cuadriláteros que emanan luz directa e indirecta sobre los ambientes.
Reside en la esencia de DESK Matrix el recuerdo de una ventana a través de la que observar lo que sucede o de un lienzo sobre el que plasmar de un modo distinto la rutina. La combinación de estos tetrágonos está sujeta a una necesidad de bocetar la sala y adornar con ellos cada habitación o techo. Le Corbusier afirmaba que la geometría soluciona los problemas de la arquitectura, pero quizás esta ciencia también pueda intervenir en otros conflictos y ponerles remedio. A veces solo hay que dejar que inunde ciertos rincones para traer la simetría y el orden a los espacios y a nuestras vidas.
