Desde la implementación del estándar passivhaus en la década de los 90, la mirada sostenible en la arquitectura se hizo mucho más patente. Confort interior y bajo consumo energético parece un binomio indispensable para los tiempos que corren, pero no es ninguna novedad si pensamos en los milenarios yaodongs chinos. El estudio TOWOdesign ha sido el encargado de diseñar la exhibición Cave Dwelling Shall Predict the Future, que pone de manifiesto esa transición desde la casa cueva a la casa pasiva: la predicción del futuro próximo.
La historia de la casa cueva o yaodong
Hace 4000 años, el hombre modernizó la caverna y el norte de China comenzó a poblarse de viviendas talladas en laderas o cavadas en el suelo. Esta actividad quizás se piense como una práctica olvidada, algo que tan solo nos llega como un recuerdo arqueológico, sin embargo estas residencias no pertenecen exclusivamente al pasado.
Tras alcanzar gran popularidad durante la dinastía Han (206 a.C. a 220 d.C.), los yaodongs siguieron utilizándose, y hoy en día continuan siendo un hogar para muchas familias, incluso en la gran provincia de Xi’an; la metrópoli que no solo atesora los famosos Guerreros de Terracota, sino también una muestra viviente de la cultura de casas cueva.
Como un agujero en la tierra, estas construcciones poseen cualidades de aislante térmico tanto en verano como en invierno, convirtiéndose a priori en lo que actualmente conocemos como casa pasiva o Passivhouse. Quién iba a decirnos que una reliquia milenaria, con un programa arquitectónico sencillo, podría ser actualmente un ejemplo de sostenibilidad y una inspiración para el futuro. Precisamente este es el pensamiento que se sostiene en Cave Dwelling Shall Predict the Future, la exposición diseñada por TOWOdesign en Xi’an, donde la historia local resurge para ofrecer un destino distinto al yaodong en nuestra vida contemporánea.
El diseño de casa pasiva del estudio chino TOWOdesign
Los integrantes de TOWOdesign han planteado un recorrido completo que explica la actualización y adaptación de las casas cueva en su transición hacia casas pasivas más modernas. La exhibición presenta un trayecto por seis salas específicas que aportan una mirada al desarrollo tecnológico, presidido por un diseño multisensorial en toda su apariencia.
La primera parada tiene lugar en una habitación oscura donde el visitante se resguarda dentro de una caja de vidrio electrocrómico. Imágenes vívidas y luces se proyectan como una espiral hiptónica hasta que la ilusión se desvanece. La transparencia transmite el dolor del ahora: un cementerio de máquinas en el que aparatos de calefacción y refrigeración yacen hacinados en las paredes. El apogeo de la tecnología reducido a basura climática en desuso.
La sorpresa atrapa cuando la siguiente estancia abraza un viaje experimental a la caverna. Las estructuras biomórficas atraviesan la galería como una techumbre y se dejan caer sobre el suelo a modo de soportes desde los que nacen maquetas 3D. Estas curvas fluidas imitan los patrones de erosión eólica de ambientes desérticos y se unen a paredes de ladrillos grises que contrastan con la esencia orgánica de la “gruta”. Este mismo esquema de arenisca se repite a escala escultórica en los asientos de la sala de cine, en la que una pantalla curva nos informa sobre la herencia patente de las casas cueva en las casas pasivas.
El resto de áreas se encuentran insertas en un aura minimalista y pura, donde la luz nívea es la gran protagonista junto con la madera. El cometido de estas zonas no es otro que el de avivar el deseo de conocer a través de lo interactivo y lo táctil. Como no podía ser de otra forma, esta performance multimedia da paso a la naturaleza, por ello el final del trayecto desemboca en un bosque: el regreso al origen, al cuidado frágil de lo que nos da vida. Compuesto por un círculo de madera, la posición espejada permite que se expanda en la óptica del usuario, haciéndose completamente infinito. Aquella caja tecnológica del principio cae en el olvido prometiendo un porvenir verde.
TOWOdesign apuesta por la sostenibilidad rescatando una concepción autóctona de residencia, con un diseño expositivo de inmersión donde todo se encuentra sumamente conectado. Ya en ROOM Diseño nos adentramos en las casas subterráneas, pero esta iniciativa da un paso más allá. La conversión de una idea primigenia en un ejemplo duradero y posible. ¿Está el humano condenado a regresar a las cavernas? Nunca lo primitivo fue un hecho tan futurista.