Hemos hablamos con Fernando y Humberto Campana, conocidos popularmente como los hermanos Campana o Estudio Camapana , con motivo de la exposición retrospectiva 35 Revoluções que tiene lugar en el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro y que que celebra su impresionante trayectoria hasta la fecha. Repasamos con ellos 35 años de diseños y de ideas que van mucho más allá de esa nueva sintaxis con la que irrumpieron en la escena internacional a finales de los 90.
Este hito tan dulce en su carrera -siempre hace una especial ilusión ser reconocido en tierra propia-, ha llega en momentos extraños: la fecha de la inauguración estaba fijada para dos días después de que se decretara el confinamiento, por lo que durante la charla estaba la incertidumbre que no saber cuándo podremos visitarla. Sin embargo, las consecuencias de las políticas actuales en su país, parecen preocuparles más que los posibles efectos de la pandemia.
Además de sus grandes hits, nos hablan de esas piezas inéditas, más cercanas a la creación personal, incluidas en esta exposición. Ilusionados, explican que los elementos que componen el concepto expositivo se llevaron a cabo en conjunto con los miembros de la Spectaculu Escola: ONG con la que colaboran y con la que utilizan el diseño como herramienta de transformación social.
Con la distancia que da el tiempo, nos hablan de cómo fueron sus comienzos, de lo que realmente han construido con su trabajo, íntimamente enraizado en las culturas e identidades de Brasil. Reconocen que fue Lina Bo Bardi la que llamó su atención sobre la riqueza de técnicas vernáculas brasileñas, y desde ese momento decidieron incorporarlas en a su trabajo.
Expertos en esquivar etiquetas, no distinguen entre arte y diseño, ya que se manejan igual de bien en ambos terrenos. Van del material a la forma y sus creaciones, anárquicas, surgen de la intuición de ambos. Después de todo, sospechan que el no haber tenido formación reglada les permitió una libertad que les llevó a encontrar una voz propia e incluso a desarrollar un nuevo lenguaje del diseño.
Pocas cosas les enorgullecen tanto como el haber puesto en marcha un estudio que emplea a 20 personas en Sao Paulo, con lo que supone conseguir esto en un lugar como Brasil, puntualizan. En 2009, después colaborar con varias ONG locales, deciden fundar el Instituto Campana con tres misiones muy claras: utilizar el diseño como herramienta de transformación social, proteger y promover las técnicas de producción tradicionales de Brasil, así como mantener y difundir su propio trabajo.