Aunque conocida como dibujante de literatura infantil, el trabajo de esta francesa sobrepasa unas limitaciones tan obvias. Sus planteamientos estéticos (entre el trazo japo y el peso de la pintura flamenca del S. XVII) o el enfoque cinematográfico en su manera de dibujar, la convierten en una ilustradora sobresaliente. Alicia en el país de las maravillas es su último trabajo y en él, la mente poética de Dautremer sorprende por la manera decadente y sobrecogedora de entender a los personajes de Lewis Carroll.