Desde su origen industrial, la cerámica ha servido como ese lenguaje matérico para explicar cómo construimos el mundo. Y ahora Sapienstone ̶ marca distribuida en España por Cupa Stone- ha introducido una nueva capa 4D a sus superficies, dando lugar a un porcelánico donde la tecnología no imita la naturaleza: la reinterpreta desde dentro, con espesor incluido.
Sapienstone y la cuarta dimensión del porcelánico
Integrada en Iris Ceramica Group, Sapienstone es una de esas marcas que ha entendido la materia cerámica como un campo de investigación continuo. Siguiendo esa premisa, la firma ha erigido su identidad reivindicando superficies capaces de asumir exigencias técnicas, culturales y estéticas que reflejan los avances del diseño actual. Es por eso que la inclusión de la nueva tecnología 4D ha supuesto una transformación profunda del porcelánico full body: las vetas, los matices y la estructura visual atraviesan toda la masa del material. Un cambio de visión que modifica la forma en que entendemos los componentes empleados en la arquitectura y el diseño.

Durante siglos, materiales como la piedra, la madera o el mármol mostraban una cara visible que ocultaba su interior. Sin embargo, con 4D Ceramics de Sapienstone, este enfoque se rompe al convertir el espesor en parte activa del proyecto. No se trata de decorar un plano, sino de hallar una continuidad real entre superficie y volumen, algo especialmente relevante en encimeras, mesas o elementos donde el canto deja de ser residual. Una técnica que no se limita a reproducir un efecto visual, sino a definir el comportamiento mismo del objeto.


4D Ceramics. Tecnología industrial, memoria mineral
De este modo, surge un porcelánico que encarna la idea de una roca contemporánea: compacto y con una lectura honesta de su composición, alejada de la simulación superficial. Aunque su desarrollo es radicalmente tecnológico, esta apuesta de Sapienstone mantiene un vínculo claro con procesos primitivos. El sistema de estratificación recuerda a las formaciones rocosas metamórficas, donde presión, tiempo y temperatura generan estructuras internas complejas. Una concepción geológica que han traducido en un entorno industrial controlado, capaz de representar capas, vetas y densidades con criterios de sostenibilidad.


Es así como cocinas, espacios de trabajo o mesas domésticas se convierten en escenarios donde la tecnología se inserta con naturalidad. Esta fusión entre lo ancestral y lo avanzado sitúa a Sapienstone en una posición singular dentro del sector, gracias a un planteamiento industrial consciente de su impacto. De hecho, la manufactura de estas superficies está vinculada a iniciativas pioneras como el uso de una mezcla de hidrógeno verde y gas natural en los procesos de fabricación, a través del proyecto H2 Factory® de Iris Ceramica Group: una planta de producción con los más altos estándares en la localidad italiana de Castellarano, en Reggio Emilia.

Como escribió el historiador del arte Alois Riegl, los materiales no son neutros: condicionan la forma de construir, de habitar y de pensar. De ahí surge una pregunta inevitable: ¿qué tipología necesitamos para configurar los espacios donde transcurre la vida contemporánea? Fácil: aquellos que sean duraderos, coherentes y atemporales. Aquellos, como 4D Ceramics, que demuestran que el futuro del diseño no niega el origen de la materia, sino que la reescribe con herramientas del presente.
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