La Plaza de Toros de Las Ventas cambió el toreo por interiorismo y el capote por arte contemporáneo en la primera edición de Madrid Inside Art & Design (MIAD). Del 4 de febrero al 17 de marzo, pudimos darnos un paseo por sus más de 30 espacios para sumergirnos en una atmósfera que reflejaba el presente y el futuro del diseño. Y aquí te mostramos los 10 ambientes que más nos impactaron.
Ascale Hotel. Ascale. Laura Carrillo Interior Design
Quien viva en el siglo XXI sabe la importancia que tiene el confort estético y funcional en el universo hospitality. Y, sin salir del recinto de Las Ventas, la diseñadora Laura Carrillo lo ponía en práctica sorprendiéndonos con Ascale Hotel: una suite contemporánea de 60 m2 donde el material de la firma Ascale dialogaba con el entorno mudéjar en el que quedaba enmarcado.
La polivalencia de las placas porcelánicas recubría las superficies de cada zona —living, baño y dormitorio—, que fluían armónicamente configurando un lienzo visual de texturas pétreas, detalles veteados y cromatismos en terrosos y azules. Un impactante juego de diseño que nos llamaba a postergar todos nuestros compromisos para hospedarnos en el bienestar de su aura. ¿Alguien sabe el número para hacer una reserva?
BEATBAR. ECOcero Acoustic. Alejandra Pombo Interiorismo
No se puede subestimar el poder de los paneles acústicos. Sobre todo, si además de aislarnos del sonido también logran transportarnos a otra época sin necesidad de máquinas del tiempo. La interiorista Alejandra Pombo tomó el material de ECOcero Acoustic y su amplia gama cromática para viajar desde el presente al diseño de los años 20: en pleno apogeo del art déco y de la Ley Seca de los Estados Unidos.
Y basándose en este contexto, plasmó el speakeasy BEATBAR, un club clandestino conquistado por los colores granates y verdes, además de las formas geométricas y curvas. Una verdadera experiencia sensorial que ponía de relieve la versatilidad del producto de ECOcero, y que nos sumergía en la atmósfera más cosmopolita de los los roaring twenties en plena ciudad de Nueva York.
Clandestino. Uecko y Colección Alexandra. Disak Studio
A finales del siglo XVIII, proliferó en Londres una nueva moda que se exportaría a otros países: la de los clubs privados; sitios caracterizados por la elegancia y el origen noble de sus miembros. Allí, los hombres más poderosos del momento se reunían para debatir el rumbo del mundo. Y trayendo al presente esta atmósfera masculina y misteriosa, Disak Studio creó Clandestino: un salón para gentlemen diseñado con el mobiliario selecto de Colección Alexandra y perfilado con la exclusividad de los sistemas de armarios de Uecko.
Con tan solo traspasar el cuidado armazón de madera con vitrinas de su entrada, se podía respirar el aire british de la estancia, donde destacaba el imponente mueble-bar Traveler para prepararse un delicioso Vesper Martini. Un lugar tan sofisticado que incluso podríamos habernos encontrado al mismísimo James Bond.
It’s a Sin. La Ebanistería. Simona Garufi Studio
Quien conozca la labor de Simona Garufi sabe que contar historias es algo intrínseco en sus espacios. Y su trabajo en MIAD junto a La Ebanistería no podía ser menos. It’s a Sin recogía el relato de los Siete Pecados Capitales de nuestro tiempo: las distintas redes sociales que esclavizan nuestra rutina; y qué mejor ubicación que una iglesia desacralizada —oculta tras una estantería— para condensar todo el imaginario. Una estancia nívea donde el único ente omnipresente era el cromatismo led, la domótica y un mobiliario lleno de referencias sacrílegas. Una misa performática —erigida gracias a la participación de 26 empresas— que nos hacía repensar nuestros propios actos, liberarnos de ellos y cometer el mejor pecado de todos: sumarnos a vivir un futuro mucho más consciente y sostenible.
Refugio. Ramos y Cobos. Ledesign4U Studio Interiorismo
¿Cómo sería Le Cabanon de Le Corbusier si se hubiese diseñado en pleno siglo XXI? Lo más seguro es que se pareciese al Refugio que Ledesign4U Studio Interiorismo proyectó para la empresa de ebanistería Ramos y Cobos. Un rincón que abrazaba la madera, haciéndonos sentir dentro de un tronco domesticado.
Su posición como material principal lo encontrábamos en paramentos verticales y horizontales, en techos y suelos, pero también enmarcando la piedra mural. Dos áreas dividían el espacio: una para pensar —al abrigo de una chimenea— y otra para pasar a la acción, donde se había una presencia más pétrea con domótica de última generación. Un Refugio de calma que, de manera sosegada, nos acogía permitiendo que nuestras ideas no dejasen de fluir.
Renaissance. EDRA. Shelum Bautista
¿Quién dijo que el Renacimiento fuese algo del pasado? El showroom de mobiliario italiano, Shelum Bautista, tomó su inspiración de la filosofía de este periodo histórico para cincelar —como los grandes maestros del Cinquecento— un ambiente para EDRA. El resultado permitía resaltar la excelencia de las piezas icónicas de la firma italiana —como el reflectante aparador Scrigno del Estudio Campana— por medio de dos livings.
Bajo el concepto The Natural High Tech, la tecnología sonora de Bang & Olufsen dialogaba con la artesanía industrial de EDRA en una simbiosis completamente atemporal. Un planteamiento espacial antropocéntrico que ponía el bienestar en el centro de todo.
ROOM29. Natuzzi. Pepe Leal
Si unimos la exclusividad a un estilo cosmopolita y ecléctico, la combinación daría como resultado ROOM 29. Esta suite de hotel proyectada por Pepe Leal para Natuzzi es una inmersión por las distintas colecciones de mobiliario de la firma italiana.
Un verdadero showroom residencial en sus tres ambientes: sala de estar —dominada por el contorneado sofá Melody o las escultóricas mesas Splash—, el dormitorio —cuyo protagonismo pertenece a la cama Cala— y un baño completo, donde el suelo de la empresa Terraconti abandonaba la solería para recubrir también los muros. Una labor de armonización cromática e iluminación sutil que nos invitaba a aislarnos en su interior; dejando claro que el mejor plan era poder disfrutar de este ecosistema Made in Natuzzi.
Skyline. IconnicoStudio
La belleza de una gran ciudad siempre se mide por su Skyline. De ahí el éxito de rascacielos que nos ayudan a inmortalizarlo en nuestra retina. Pero a veces habitar el cielo implica conocer algo más que un paisaje dominado por el sol; y con esto en mente, IconnicoStudio quiso presentarnos otra realidad distinta: la de experimentar una tormenta dentro de un lujoso hotel.
Una recreación que parte de un hall bañado por un tinte elegante y clásico, con una mezcla de texturas y materiales en sus paredes —desde madera a textiles estampados— para dejar paso a la gran panorámica escondida tras la puerta metálica: una coctelería revestida de espejos. Un mise en abyme de reflejos que potenciaban, con el poder gradual de la luz, una nueva visión de cómo vivir las alturas bajo el clamor de los relámpagos.
Supernova. Besform y Rekker. Circulocuadrado Studio
“En el mundo del diseño y la arquitectura, los espacios no son simples contenedores de muebles y objetos; son lienzos en blanco donde se plasma la esencia y la personalidad de quienes los habitan”, decían desde Circulocuadrado Studio, el equipo que se encargó de realizar el stand de dos firmas hermanadas: Besform y Rekker. Precisamente, esa es la filosofía con la que impregnaron Supernova, el apartamento donde relucía el cuidado y la excelencia técnica de cada una de las colecciones.
Por un lado, resaltaba la monumentalidad sublime de las cocinas de Rekker como centros neurálgicos de reunión doméstica —tanto en exterior como en interior—; y, por otro, el mobiliario artesanal de Besform, que instalado en la zona de noche llevaba el relax idóneo para el descanso. Una vivienda site-specefic que nos acercaba al lujo desde la sencillez más absoluta: esa que consigue destacar sin necesidad de hacer ruido.
Terra Lighting. Vibia. Welcome Design
Hay que tener talento para crear ambientes que emocionen, pero mucho más para domar la sombra, hacer de la luz un material, hablar el idioma del color como una lengua materna. El alma del estudio Welcome Design está definida por tres componentes esenciales: el trazo, la gráfica y el cromatismo. Y en Terra Lighting conjugaron todos ellos con la aportación de las diferentes luminarias de Vibia, concretamente Array, Dots, Flamingo y África.
Este espacio liminal destinado al descanso perfilaba una atmósfera arquitectónica en tonos terrosos, llevando también esta calidez al exterior del propio stand. Ingresar en esta cápsula de diseño nos instaba a vivir dentro de un concepto, de una abstracción que posicionaba a la iluminación como la responsable de dar forma a las texturas, a los recuerdos y a una escenografía digna del futurismo más exquisito de Denis Villeneuve.