Vo Trong Nghia Architects presentó para el Centro de visitantes Grand World una arquitectura de una belleza mística. Una que, como una gran catedral de bambú, remite a la pausa a través de la naturaleza.
Un templo de bambú para conectar con la pausa
Parar parece un acto imposible en una sociedad que se atreve a callar al mismísimo silencio. Ruido, frenesí, voracidad, vértigo, estrés… conforman el estado anímico contemporáneo. Anhelar lo liviano a golpes y estrépitos. Dar la espalda y negar la mirada. ¿Desde cuándo el ser humano quiso dejar de ser humano? Con la gran industrialización del sudeste asiático ha surgido un capitalismo feroz donde se olvida cómo era aquello de despertar con un cacareo o recoger un huevo con las propias manos. Porque ahora el huevo lo recoge un servicio de delivery envasado en plástico. ¿Qué pasó con nuestra naturaleza circundante e interior?

Vo Trong Nghia estudió en Japón, pero no dudó en volver a Vietnam, su cuna original. Lo que empezó allí no solo le valió un nombre en la arquitectura de su país —y en la de fuera de sus fronteras—, sino que le hizo perfeccionar un prisma por el que las manos retornan al acto de quietud. Pausa, bambú y un templo, aunque no lo sea realmente y se trate de un centro de visitantes para el turismo de Phú Quốc.

Si los vitrales cubrían los muros de las grandes catedrales del medievo, aquí, ahora y en esta isla vietnamita, no hacen falta, porque las propias cañas de la planta tamizan la luz con una suavidad sedosa. Más de 42 000 tallos de bambú. Celosía ligera, a pesar de la densidad de su trama. En esta arquitectura la belleza es táctil y sosegada. Su rumor no se impone, sino que da voz, con generosidad, a esa quietud que tratamos de esconder. En sintonía con la naturaleza.


Un centro de visitantes de VTN Architects
1460 m2 dedicados a una meditación y a la búsqueda del equilibrio. Vo Trong Nghia Architects trabaja desde principios de la filosofía budista aplicada a la arquitectura. Quizás entre la acción artificial y la natural. La apertura a una intimidad armónica con espíritu de compromiso inquebrantable. Como un descanso para nosotros y para la tierra. Porque la verdadera ecología es humana: la que pasa por sostener también el corazón del hombre. Vo Trong Nghia Architects decide frenar, plantar oposición a la desnaturalización del entorno y lo interno, con lo constructivo como medio para crear espacios que realmente lo son.

El centro de visitantes Gran World ejerce de paréntesis y transcurso en un paisaje vernáculo. Un refugio para lo contemplativo con forma de loto o de tambor de bronce: símbolos de la tradición vietnamita. Cuando se sabe observar, se sabe que escuchar puede ser sinónimo si se presta atención al pasado. Y es que la memoria que persiste permite la no-desaparición.

Los deseos y los apetitos humanos son insaciables. Y esa avidez cae en el abuso. Parar se percibe como un acto imposible. ¿Cómo reconectarnos con la naturaleza? Si amar es mucho más que observar, ¿quién sabe amar realmente hoy? Quizá Vo Trong Nghia y su estudio de arquitectura lo hagan. ¿Podremos aprender?
En este enlace puedes leer más artículos sobre Vo Trong Nghia Architects.
El estudio vietnamita VTN Architects ha empleado arcos, cúpulas y rejillas angulares para conformar un entramado creado a partir de bambú. Un espectáculo de luz donde se combinan los sistemas constructivos Arches, Domes y Grid, desarrollados por el estudio tras su experiencia adquirida por su continua investigación en torno a la arquitectura con bambú.