Más allá de crear una lámpara única en su especie, el artista alemán Heiko Blankenstein centra su trabajo en desarrollar paisajes propios de una naturaleza artificial y galáctica. Sus principios: observar y transformar las ideas que tenemos sobre el espacio exterior, lejano e infinito. Blankenstein acerca a la Tierra las estrellas y otros cuerpos de luz a través de su colección de objetos cristalizados y topografías lunares. Lighting no es sólo un foco radiante, también aporta un halo de extravagancia y futurismo. Paradójicamente se trata de una naturaleza que el autor presenta visualmente encendida, pero fría y ausente de vida.