Se trata de una reforma interior en una casa en Alella (Barcelona) donde se ha apostado por la creación de un ambiente neutro y relajado y la búsqueda de texturas y materiales naturales como la arcilla que transmiten calma y sosiego además de sus buenas propiedades higrotérmicas que ayudan a conseguir un ambiente más saludable.
El cliente requería un cambio estético y funcional de la cocina y comedor, le propusimos abrirla al cuarto de estar y comedor, eliminando divisiones y tabiques y transformando la planta en un gran espacio diáfano.
La cocina abierta se integra en el espacio doméstico y posibilita una flexibilidad de usos mucho más amplía que el propio de la cocina. La cocina existente, oscura y sin vistas, ahora pasa a ser el centro de la casa, más luminosa y conectada con el exterior.
Con un diseño sobrio y una gamma cromática de revestimentos y mobiliario neutra conseguimos una atmósfera serena, acogedora y relajada.
- Estudio
- ENRIC ROJO ARQUITECTURA
