El proyecto Casa Nascente nace del diálogo constante con el paisaje que la rodea. Desde el inicio, la intención fue otorgar a las vistas el papel de protagonistas absolutas. Situada en Caminha, al norte de Portugal, la vivienda se abre completamente al este —de ahí su nombre, “Casa Nascente”, o “Casa del Sol Naciente”— para capturar la luz del amanecer y dejar que esta defina el carácter del espacio.
Casa Nascente
Arquitectura e Interiorismo – Thema Atelier
Fotografía – Bruno Barbosa
El principal desafío fue crear un interior con identidad y coherencia estética, pero sin que el diseño interior compitiera con la fuerza del entorno. La solución fue concebir una casa casi completamente acristalada, donde la arquitectura y el paisaje se funden de manera natural. La luz se convierte así en materia, modulando las superficies, definiendo volúmenes y transformando la atmósfera a lo largo del día.
El suelo continuo de microcemento, presente en toda la vivienda —incluyendo las zonas exteriores, los baños y la cocina—, refuerza la sensación de unidad y continuidad. Este material neutro y luminoso actúa como un lienzo que potencia la claridad y la serenidad del espacio. A esta base se suman detalles en madera natural, que aportan calidez y equilibrio, junto con azulejos tradicionales, elegidos por su valor artesanal y su conexión con la identidad rural del entorno. En la planta superior, el uso de rejilla de caña natural en los frentes de los armarios introduce textura y un guiño al trabajo manual, reforzando la autenticidad del proyecto.
La planta baja está pensada como un espacio fluido donde salón, comedor y cocina conviven sin barreras visuales. Este planteamiento fomenta la convivencia y la comunicación natural entre los espacios. Los grandes ventanales del salón se pueden abrir por completo, eliminando la frontera entre interior y exterior y permitiendo que el jardín y la luz penetren en la vivienda como una prolongación del propio espacio habitable.
En la planta superior se ubican los tres dormitorios, cada uno cuidadosamente orientado hacia el paisaje. Las camas se disponen frente a los ventanales, que también se abren totalmente, ofreciendo la experiencia de despertar inmerso en la naturaleza. El tabique que separa los dormitorios de los baños no llega al techo, una decisión deliberada para mantener la sensación de amplitud y favorecer la fluidez visual y lumínica.
Cada pieza de mobiliario fue diseñada por Thema Atelier y producida en talleres del norte de Portugal, empleando materiales locales, nobles y auténticos. Esta atención al detalle y al trabajo artesanal refuerza el carácter atemporal del proyecto, donde cada elemento forma parte de un mismo lenguaje arquitectónico.
El resultado es una casa que trasciende la función doméstica: un refugio que respira calma, lleno de matices de luz, texturas naturales y proporciones armoniosas. En Casa Nascente, la arquitectura, el paisaje y la vida cotidiana se funden en un mismo gesto de serenidad y equilibrio.
- Estudio
- Thema Atelier
