La última obra arquitectónica del estudio Neri&Hu consiste en una destilería de whisky de malta para la empresa Pernod Ricard. Emplazada frente a la imponente mole del monte Emei, en la provincia de Sichuan, el complejo presenta un diálogo íntimo y secreto con este entorno impresionante cargado de resonancias.
La ancestralidad china en lo nuevo de Neri&Hu
Entre los primeros objetos diseñados por Neri&Hu llamó enseguida la atención un juego de té nombrado Zisha; apenas una colección de cuencos de diverso tamaño y color de exquisita sencillez. Fabricados en una arcilla milenaria de la región de Jiangsu, esta se va impregnando con el uso del aroma de las hojas de infusión, de manera que cada pieza se decanta y se singulariza en un moroso proceso de curación a lo largo del tiempo, como la cazoleta de una pipa, replicando la cualidad de la tierra de la que procede.
La última obra arquitectónica del estudio fundado en 2004 por Lyndon Neri y Rossana Hu parte de un enfoque como el anterior, pero a una escala bien distinta. Se trata de una destilería de la empresa Pernod Ricard, emplazada sobre una suave elevación en el meandro de un arroyo frente a la imponente mole del monte Emei (Sichuan), una montaña budista sagrada que alberga viejos templos, y que la Unesco recoge en su lista de Patrimonio de la Humanidad.
Como es sabido, la calidad del whisky depende estrechamente tanto del agua que se emplea en su destilación como del suelo por el que esta discurre. A esa condición material se añade, en este caso, la densa connotación simbólica del lugar, así que Lyndon y Rossana han decidido remitirse a otro principio ancestral de la cultura de este país conocido como shan-shui —literalmente, “montaña-agua”—. El término designa uno de los géneros característicos de la pintura china de paisaje, definido por el contraste de opuestos: la solidez y permanencia de la montaña, el flujo en eterna transformación del agua y la interacción de uno en el otro como recurso superador de ambos que genera una belleza completa y totalizadora. Algo así como una versión oriental y metafísica del concepto occidental de lo pintoresco.
Una destilería vernácula para el whisky Pernod Ricard
El complejo se resuelve en una suerte de diálogo íntimo y secreto con este entorno impresionante y cargado de resonancias. Sus diversos componentes se pliegan con delicadeza a la topografía del promontorio, conectados por senderos de hormigón y piedra encajados en la superficie y que guían al visitante en un recorrido virado que organiza las vistas y se acompaña siempre del rumor del agua.
Tres son los elementos básicos. En la zona nordeste se ubica la parte industrial —la destilería propiamente dicha— albergada en unas naves arquitrabadas, alargadas y ligeras que se posan con levedad sobre la loma como dedos de una mano. Sus cubiertas de teja cerámica a dos aguas sobre postes hormigonados evocan, de modo sintético, la arquitectura vernácula. Un camino desciende suavemente hasta el edificio central: un cuerpo circular escalonado que aloja cinco salas de cata subterránea. Por último, un tercer pabellón de planta cuadrada, algo más abajo, se desplaza respecto al eje del anterior para dejar un rincón en voladizo sobre el arroyo; aquí se sitúa un restaurante que mira al monte Emei. Desde él, todavía se despliega un sistema de senderos pavimentados, igualmente embutidos en la tierra, que permite al paseante trazar de forma muy estudiada toda la orografía.
El volumen circular es el núcleo del conjunto. Se configura alrededor a un gran patio cubierto por una cúpula de hormigón abierta al cielo por medio de un gran óculo. Desde él, una fuente en cascada lleva el murmullo y el espectáculo del agua hasta el corazón mismo de un espacio majestuoso, que recuerda al auditorio del Aranya Art Center, otra de las obras recientes del estudio. Por este recinto se accede a las salas de cata, dispuestas radialmente.
Al exterior, esta especie de zigurat conversa discretamente con la masa colindante. Se reviste de unas rampas perimetrales por las que se llega a su terraza superior, desde la que afrontar tanto la presencia neblinosa y rotunda del monte como la vista cenital del vacío interior. Según crece en altura, su masa se aligera con una celosía de ladrillos colocados en esquina y que poseen un aire autóctono. El prisma del restaurante también se articula aledaño a un patio central de perfecta geometría, acompasada con el trayecto del agua una vez más. Este sitio se dispone en el perímetro, enmarcando la perspectiva de la montaña y las terrazas de cultivo del entorno.
La mejor arquitectura de Neri&Hu
El juego de contrastes está afinado al máximo y siempre presente. Los paramentos de hormigón se recubren a menudo con piedras de los peñascos extraídos de la excavación, como devolviendo la tierra a la tierra. Lo sólido fluye como un río al compás de las variaciones de cota, entrando y saliendo del terreno, haciéndose eco en el escalonamiento del volumen redondo del paisaje aterrazado al otro lado del arroyo. Un detalle tan ajeno a las coordenadas culturales chinas como la destilación de whisky se asienta en este paraje sagrado, simbólico y milenario con la delicada solemnidad de los templos budistas.
No solo estamos ante la mejor y más compleja y emocionante de las arquitecturas originadas hasta ahora por Neri&Hu, menos conocidas entre nosotros que su labor como diseñadores, incluidos en los mejores catálogos europeos de la última década. También puede verse como una suerte de manifiesto de su poética, un acabado híbrido de sustrato cultural oriental y práctica proyectual occidental que dibuja la identidad de la pareja. No en vano, Lyndon y Rossana —chinos de la diáspora, como ellos se describen, formados en Estados Unidos— fueron los primeros nombres que se asentaron en la escena internacional desde el gigante asiático con una propuesta capaz de tender puentes mediadores. De la mano —vale la pena recordarlo ahora— y del olfato siempre atento de Ramón Úbeda, que los descubrió para Bd hace ya 12 años.
En este enlace puedes ver otros proyectos de Neri&Hu.
Lyndon Neri y Rossana Hu son los socios fundadores de Neri&Hu Design and Research Office, un estudio internacional de diseño arquitectónico interdisciplinar ubicado en Shanghái, China, con sede también en Londres, Reino Unido.
Pernod Ricard es una empresa francesa que produce bebidas alcohólicas. Los productos más famosos de la compañía son los pastis Pernod y Ricard, ambos licores de anís, y a menudo identificados simplemente como Pernod o Ricard. La empresa también produce otros tipos de pastis.