El ingenio obvia dificultades. Esta frase ejemplifica el proyecto que el grupo de Zalewski Architectre ha ideado para solventar la necesidad de aprovechar los días soleados en algunos oficinistas de la ciudad de Gliwice, Polonia.
El resultado es un paseo transitable en las nubes, casi literalmente. Desde una altura de 3 pisos, el personal puede estirar las piernas durante una ajetreada jornada de trabajo sobre una pasarela de 80 cm de ancho. Al mismo tiempo, la propuesta ha conseguido cambiar las vistas a un patio estrecho y oscuro por un balcón transitable suspendido en el aire.
El camino está reforzado en su parte superior con vegetación, lo que añade comodidad a los usuarios. Casi como si anduviesen por un prado. Por el otro lado, la estructura de metal pulido produce un reflejo que hace creer a quien pasa por el abrupto patio que las personas vuelan sobre sus cabezas. Toda una experiencia a vista de pájaro. Y a vista de hormiga.