Tianshui es una de las paradas de la ruta de la seda a su paso por la montañosa provincia de Gansu (China). En las laderas de ese valle se excavan las cuevas de Maijishan, un complejo rupestre que se remonta a la dinastía Quin. Y el departamento de turismo de la región contó con ZXD Architects para el diseño de Maiji Mountain Visitor Center, un centro de visitantes inspirado en el paisaje que forman las cumbres del entorno.
Un centro de visitantes como una montaña en el valle
Los centros de visitantes son un tipo de edificio difuso. Pueden servir para dirigir y orientar asépticamente al turista o para secuestrarlo dentro de un lugar grandilocuente, que le introduzca en la aventura de su viaje. Para el Maiji Mountain Visitor Center, el estudio ZXD Architects se tuvo que olvidar de la tibieza. El encargo les pedía encajar varios auditorios, un teatro y un número de salas polivalentes y de exposiciones dentro de un contenedor que acogiera a los desamparados turistas.
Los arquitectos superpusieron con habilidad todos los espacios de la lista alrededor de un gran vacío central para optimizar las circulaciones. Además, decidieron fragmentar el gran volumen en piezas macladas unas con otras para permitir entradas de luz y que, al curvarse hacia arriba, adquirieran el aspecto de una cordillera. El revestimiento cerámico del mismo color de la tierra del paisaje terminaba por rematar el efecto.
Dentro optaron por un interiorismo de escenas vinculadas a los distintos usos del círculo. El trabajo estructural lo resolvió con una sucesión de estancias diáfanas que seguían las líneas curvas de la arquitectura. Cada una de las zonas se dota de sistemas de iluminación complejísimos pensados para exponer, representar o epatar. Y, aunque es posible que durante el recorrido sea difícil acordarse de las montañas, los grandes bloques siguen perdurando en su esencia.
Un rascacielos tumbado sobre Tianshui
El Maiji Mountain Visitor Center supone un nuevo hito dentro de una población que se extiende a lo largo del valle. Su configuración gira con gracia en torno a una plaza que puede utilizarse para extender la actividad al exterior, a pesar de que en escala pueda parecer difícil de abarcar. Aun así, su gran tamaño ha sido domesticado para que la altura no rebase la de las edificaciones colindantes, pero la singularidad del resultado sigue siendo apabullante. Es muy difícil hacer pequeña una caja de 16 000 m2.
Esta clase de proyectos recuerdan a la facilidad con la que los primeros rascacielos de Chicago y Nueva York apilaban todos los ambientes, repartiéndose por las ciudades en armazones verticales que consumían la menor cantidad de terreno posible. En esta ocasión, ZXD Architects ha volcado con delicadeza uno de esos esquemas y ha dejado todas las unidades arquitectónicas una junto a otra dentro de un bonito envoltorio. Una torre tumbada del valle que, en realidad, es ahora una montaña.
En este enlace puedes leer más artículos sobre otros centros de visitantes.
En la ciudad de Tianshui una de las paradas de la ruta de la seda a su paso por la provincia china de Gansu.
Es un centro de visitantes que incluye auditorios, un teatro, salas de exposición y una gran plaza
