El festival Concéntrico ha llegado a su 7º edición con el desafío de reinventar la ciudad y revalorizar los espacios públicos. Sin olvidar otro objetivo: seguir reinventándose a sí mismo y aportar nuevas ideas que articulen un relato riguroso a partir de la conversación entre ciudadanos y entorno.
Un festival de arquitectura y diseño para reflexionar sobre el uso de la ciudad
Con la misión de potenciar las posibilidades de la madera de Garnica, evidenciar su sostenibilidad y reflexionar sobre nuevos campos del diseño del entorno y el urbanismo, la convocatoria Concéntrico 07 anima a arquitectos y diseñadores a explorar e investigar morfologías y usos para diversos rincones, céntricos o más periféricos, de la ciudad de Logroño. Una localidad que en cuatro días —ya estamos pidiendo desde aquí más tiempo para disfrutar del Festival— se convierte en un referente internacional en el que convergen profesionales y propuestas de distintos países.
Arquitectura efímera en Concéntrico 07
La edición Concéntrico 07, a la que han llegado 630 proyectos de más de 50 países, ha reunido 18 instalaciones que invitan a un recorrido experimental de descubrimiento y apropiación. Madera pero también ladrillo, que se ha incorporado este año a petición de los participantes.
Lo vemos en trabajos como el de Lanza Atelier, 1973 – 2021, realizado en la colaboración de la Embajada de México, en la plaza Ayuntamiento de Logroño. Un amplio espacio que claramente alude a lo público, al ágora y que, ahora, enmarcado en tres círculos de diámetros 20, 30 y 40 metros y 44 cm de altura invita a la reunión y a la conversación.
El ladrillo rojo visto juega con la geometría de las ventanas del edificio de Rafael Moneo, y el dibujo sobre la plaza dinamiza y suaviza un área ardua de transitar humanizando la escala monumental, a la vez que propicia el flujo de quien pasa por esa zona.
Por su parte, los también mexicanos Palma + Hanghar, con la colaboración de Cerámica Sampedro y el Taubman College de Arquitectura y urbanismo de la Universidad de Michigan, han propuesto uno de los trabajos más logrados: Tipos de espacios.
Ubicado en el pasaje de la antigua Fábrica de Tabacos de La Rioja —una zona urbana de dimensiones estrechas y alargadas, que incluye una monumental chimenea de ladrillo rojo— , el conjunto adquiere grandeza y entidad a través de la creación de una serie de estancias cuadradas de 3,6×3,6m, como si fueran habitaciones de carácter doméstico. El público puede recorrerlas y sentir la experiencia de la materialidad pisando las virutas de ladrillos colocadas en el suelo, tocando las paredes, escondiéndose en una especie de laberinto insertado en el medio de calles comerciales.
En la muestra, el contexto toma la palabra abriéndose a todas las oportunidades: a las distintas rutas urbanas se suma la geografía natural, ampliando el horizonte de conexiones de las intervenciones efímeras. En la zona de Viña Lanciano / Bodegas LAN que mira al puente romano de Mantible, se ha colocado Support your local landscape, un cartel que es una llamada de atención y que casi podría ser un lema permanente de la convocatoria.
La estructura, limpia y sólida, se planta en el medio de las viñas como un gesto disruptivo que crece de manera vertical mirando al cielo, sumando un total de 7,50 metros e incorpora una tipografía rotunda, a modo de grito, que interpela al espectador. Vivian Rotie y Pablo Saiz del Río son los autores de este singular sistema constructivo modular que puede visualizarse desde distintos puntos de la zona. Se recupera también el río Ebro, al que mucho tiempo se marginó dándole la espalda.
Junto a él tres trabajos invitan al encuentro. Entre ellos, La contemplación de un límite, de Chávarri Estudio (Chile), situado en un lugar idóneo para contemplar y detenerse, percibiendo el margen entre ciudad y naturaleza. Casi como un mobiliario, el color rojo de las seis piezas impone una fuerte presencia, integrándose con autoridad en la continuidad entre un edificio, un pasaje y el río para permitir la observación y fundirse con el marrón y el verde del entorno.
Podría decirse que, después de haber pasado las vicisitudes y complejidades de la pandemia, los participantes de Concéntrico 07 han sabido, no solo jugar con la tipografía del afuera y del adentro para privilegiar la interacción y la convivencia, sino que se vislumbra un criterio más conceptual al plantear las propuestas. Cierta dimensión de trascendentalidad humana — y espiritual — a través del proyecto, como lo manifiesta Árbre, ese gran tronco de madera caído en una de las aceras de la Gran Vía de Logroño. “Un sitio mineral” según el autor, el francés Lauren Martin, como un reclamo para preservar la naturaleza, para incorporarla en medio del cemento y la aridez de las calles. Una llamada a la vida que tendríamos que tener en cuenta para cuidar el planeta. 150 tablones de madera de Garnica en desuso van dando forma al cuerpo y a las ramas de este árbol gigante que apela a nuestras conciencias.
En la misma línea nos encontramos con 39186 Habitaciones vacías, del colectivo finlandés VAPAA, que nos habla de hallar un urbanismo que tenga en cuenta a las especies no humanas y las incorpore respetando la biodiversidad. En Casa Farias, un recatado rincón del centro histórico de Logroño, sus cajas colocadas de manera ondulada y asimétrica, funcionan como un santuario y un hotel para insectos invitándonos a que seamos partícipes del cambio climático. Al desmontarse la instalación, los ciudadanos podrán llevarse las unidades a casa para continuar el proceso de la vida.
De manera más intelectual y críptica se incorpora en el Patio del COAR el Monumento a las Hermanas de la Revolución, de Aleksandra Wasilkowska, que cuenta con el apoyo del Instituto Polaco de Cultura. Pieza alegórica de mirada feminista que dibuja la representación de un funeral de la arquitectura masculina, planteándola como las ruinas de una utopía. Su reflexión cuestiona el aspecto patriarcal de la profesión y está dedicada al trabajo de las mujeres visionarias y arquitectas como Ursula K. Le Guin, Pamela Sargent, Anne Lacaton, Lina Bo Bardi, Halina Skibniewska, Zaha Hadid, Carme Pigem, entre otras; como una ventana a nuevas miradas y oportunidades.
Cabe destacar que todas las acciones están ligadas a procesos sostenibles y circulares, tanto la elección de las ubicaciones como la gestión de las propuestas que tienen en cuenta la reutilización y el reciclaje del material de las intervenciones.
Todas estas ideas refuerzan un contenido que, más allá de lo decorativo o espectacular, quiere ejercer el pensamiento de lo común como un disparador de calidad de vida. Ciudad y naturaleza son un todo que hay que cuidar, proteger y abrazar porque forman parte de nuestra experiencia vital. Por eso Concéntrico añade un programa de actividades —diálogos, jornadas, presentaciones y talleres— que desgranan y profundizan en esa dimensión política, social y cultural que la arquitectura expande en la gente y en su vida cotidiana.
Este año se amplían las sinergias con otras instituciones y expertos con encuentros y conversaciones que cuentan con el apoyo de Acción Cultural Española. Entre ellos estarán Bauhaus Dessau Foundation de Alemania, Arkki de Finlandia, la Trienal de Lisboa de Portugal, Storefront for Art and Architecture y MAS Context de Estados Unidos o Mextrópoli de México.
En resumen, en estos cuatro días, los distintos escenarios se erigen más allá de lo efímero y del esplendor fugaz. En ellos quedarán inspiraciones de futuro, aspiraciones de cambio, el uso del material como una herramienta inteligente de transformación y la evocación sensible de nuevas perspectivas para lugares y personas.
Concéntrico 07, el festival de Arquitectura y Diseño de Logroño, nos invita a un recorrido poético y vertebrador de innovadoras ideas para reformular nuestras ciudades y su entorno.
Detrás de cada trabajo hay procesos, estudios de impacto, análisis de gestión y producción, no solo una atractiva y epatante apariencia. Concéntrico invita, una vez más, a que la experiencia que viven tanto arquitectos y profesionales como ciudadanos sea también un modo de conocimiento significativo, de cómo intervenir en la realidad creando un lenguaje y un tejido intelectual y emocional, siempre participativo.
En este enlace pudes ver más artículos sobre las otras ediciones del festival de arquitectura y diseño Concéntrico.