La obra del artista cubano, realizada en bronce e instalada en uno de los patios del espacio madrileño, está enclavada en el MadBlue 2021, un encuentro de exposiciones, talleres y congresos. Con este evento se pretende situar la sostenibilidad como el gran objetivo del planeta y colocar a Madrid en el hub actual de la ecoeficiencia.
En el pasado mes de enero—después de que se fuera Filomena pero quedasen sus estragos—, Madrid se vio llena de calles no solo con carámbanos en los balcones y nieve en las aceras, sino con multitud de árboles mutilados, con sus ramas cercenadas por la voracidad de la borrasca. Nadie hasta entonces se había parado a pensar tanto en la vegetación de la capital porque se da por sentado que está ahí, que sobrevive, pero la relación de la ciudad y la naturaleza es, en demasiadas ocasiones, un vínculo de descuido, de maltrato. Eso es lo que intenta enmendar con el bronce Carlos Garaicoa en Línea Rota de Horizonte.
La obra del artista cubano—nacido en La Habana en 1967—se puede encontrar en las colecciones permanentes del Guggenheim Museum de Nueva York o el Museo Reina Sofía. En esta nueva incursión, con sus troncos amputados casi de raíz, excepto uno, busca que el espacio urbano no se convierta en una contra natura, sino que, a pesar de su fenomenología arquitectural, converse con el paisaje vivo que lo rodea.
La sostenibilidad, clave en el MadBlue 2021
Instalada site-specific en el patio principal del Centro de Cultura Contemporánea Conde Duque, Línea Rota de Horizonte muestra una reflexión sobre el presente de las grandes metrópolis y su opresivo trato a esos árboles que conforman el entorno. Garaicoa los observó “luchando con la dureza” del urbanismo en una de sus caminatas por Madrid, donde constantemente aparecen sus alcorques transformados en amplios ceniceros.
“Carlos Garaicoa introduce la idea de ficción para trabajar una suerte de ecología política y resignificar la urbe a partir de una mirada hacia esa naturaleza en crisis”. Quien habla es David Barro, director de arte e innovación de MadBlue 2021, un encuentro entre cultura, progreso y tecnología que ha convertido a Madrid— de abril a junio— en el hub internacional del pensamiento crítico para la recuperación de la economía orientándose a la sostenibilidad y a la noción de ciudad inteligente. Este es el motivo por el cual sus exposiciones, conferencias, talleres e instalaciones han sido declaradas como acontecimiento de excepcional interés público por el Gobierno de España.
Madrid, la capital start-up del cambio
El MadBlue 2021 tiene como motor de cambio seguir los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, y para ello son más necesarias que nunca las dinámicas que unan el sector tecnológico con el empresarial y estos, a su vez, con el cultural, el económico, el político y el científico. Toda una red de ecología circular y arte como elemento reformulador que se podrá experimentar en modalidades diferentes tanto a pie de calle como en La Casa Encendida, los Teatros del Canal o Medialab Prado, entre otros lugares.
El Centro Cultural Conde Duque como summit de la ecoeficiencia
De hecho, el Centro Cultural Conde Duque acoge varias de estas intervenciones. Dos de ellas—El invernadero rojo, de Patrick Hamilton, que quiere concienciar sobre el cambio climático, y Los mares del mundo, de Manolo Paz, que rinde tributo a los océanos de la Tierra— se pueden visitar desde febrero. Asimismo, pronto llegarán las propuestas de Amparo Sard e Isidro Blasco, un taller creativo para conformar un relato de ciencia ficción sobre la historia del edificio y su relación ecosistémica, así como una exhibición colectiva titulada El crimen perfecto, que plasma el naufragio del paraíso terrenal que hemos perdido.
Todas estas creaciones, junto con las del resto de vivencias de la capital, están pensadas para ser llevadas a cabo de manera responsable, ya sea desde el propio concepto verde que presentan, a los procesos necesarios para conseguirlas. Como resume Barro: “Más que de arte eco se trata de la ecoeficiencia de proyectos artísticos, capaces de educar en nuevos modos de producción e introducirnos en otras temáticas”.
Hasta el 11 de abril aún se puede visitar en la Sala de Bóvedas del Centro Cultural Conde Duque la exposición Bajo la superficie (miedos, monstruos, sombras).
Se trata de un encuentro sobre el desarrollo sostenible para el que Madrid se convierte en capital europea de la cultura, la innovación y la tecnología orientadas a la recuperación de la economía en base a la sostenibilidad. Para ello y durante la primavera (de abril a junio) la ciudad se llenará de exposiciones, talleres o conferencias.
En la Calle del Conde Duque, 11, entre las paradas de metro de Ventura Rodríguez, Plaza de España y San Bernardo.