Históricamente, la arquitectura y la luz siempre han tenido un vínculo inseparable. A lo largo de los siglos, los arquitectos han sido conscientes de que sin esta relación un proyecto constructivo puede quedar desvaído o conceptualmente desaprovechado. Ya lo dijo Le Corbusier en esa cita que se ha convertido en una reflexión mainstream: “La arquitectura es el encuentro de la luz y la forma”. Que es como decir que la luz determina la naturaleza de los espacios; o que la iluminación tiene la capacidad de crear atmósferas y, a la vez, de ecualizar las emociones de los usuarios.
Sobre este tema giró la charla organizada por Simon en el contexto de la última edición de Casa Decor. Un encuentro en el que tres estudios con proyectos vinculados a Simon expusieron sus estrategias para resolver la ecuación que determina la importancia de la iluminación en el contexto del interiorismo. Bajo el título La narrativa de la luz en la arquitectura, Fernando Torres (de Andreu Carrulla Studio), Sandra Antón (de ESs Interiores) y Pablo Sánchez (de Arqueha by Mr. Leco) hablaron sobre los desafíos que se encontraron para construir el discurso lumínico en sus tres propuestas: El Santuario (Espacio Roca), Auditorio Berlín Calling y Zona de estar (Espacio Gómez Grau).
A solas con el agua. A solas con la luz
Andreu Carulla Studio es el responsable de El Santuario: un cuarto de baño transformado en una zona para la sensualidad y el descanso, y ubicado en la antigua capilla del edificio. Un juego de perspectivas (baño/capilla) que el equipo de Carulla ha rentabilizado para elaborar una escenografía cuidada y efectista donde se ha buscado hacer converger el bienestar del cuerpo con la necesidad de calma del espíritu.
El objetivo era realizar una intervención que pusiera en el centro la colección Tura que Carulla ha diseñado para Roca. A partir de aquí, la creatividad de los diseñadores se enfocó en trabajar conjuntamente el agua y la luz, con el fin de generar una atmósfera sensorial y seductora. El reto, comentó el propio Fernando, fue controlar la luz natural para conseguir un delicado equilibrio entre serenidad, privacidad y hedonismo. ¿Cómo? Usando los sistemas de Simon para controlar los excesos (o carencias) de la luz natural a lo largo del día y de este modo evitar en todo momento que El Santuario perdiera su belleza decadente e introspectiva propia de un edificio religioso semiabandonado.
Funcionalidad lumínica. La luz que propicia el diálogo
Sandra Antón firma Berlín Calling, el auditorio de Casa Decor. Un anfiteatro inspirado en la estética gris del Berlín de los 80: en esas naves industriales en desuso que a lo largo de los años se han reconvertido en centros de arte y puntos de encuentro para la música electrónica. Hablamos de una ambientación ruda, pero fusionada con pequeños detalles de carácter afrancesado. Algo así como si este salón de actos estableciera una conexión entre un Berlín duro y un París clásico. Y todo ello en un muy estudiado juego de geometrías: el ángulo recto de las paredes frente a la curva de los asientos para los asistentes.
En sus propias palabras, Sandra ha concebido un espacio muy masculino y oscuro: “tan masculino y tan oscuro que la luz cobra un gran protagonismo en él”. Para conseguirlo, el material de Simon le ha permitido crear ese clima envolvente: un diálogo entre luz natura, luz artificial y mármol oscuro para potenciar esa idea de que un anfiteatro es un templo de la conversación y la palabra. Hablamos de una iluminación milimetrada y radicalmente funcional con la que lograr una visibilidad optima -y a la vez, cálida- entre ponentes y público.
Zona de estar. El espacio metafísico
Pablo Sánchez y su equipo son los responsables de Zona de estar, una propuesta conceptual donde la piedra es el punto de partida y el punto de llegada. El propósito ha sido entender la naturaleza como una gran arquitecta: un planteamiento que les ha permitido crear una “cueva espiritual” en la que el usuario solo tiene que ser, estar y sentir. Básicamente, una reivindicación de la cultura slow frente a la velocidad contemporánea en la que vivimos.
En esta colaboración con la empresa Gomez Grau, se ha buscado dar una gran visibilidad a la piedra usando la luz de forma casi imperceptible. Todo ello mediante sistemas ocultos y luminarias escondidas para aportar a la piedra una calidez extrema en un espacio pensado solo para estar y sentir. Algo que responde al interiorismo contemplativo -y esencial- que el estudio desarrolla en su práctica profesional y que aquí lo vemos como una exploración experimental más allá de la propia disciplina.
La luz más como una intuición que como un deber en Casa Decor 2024
Decía Ingo Maurer hace años que su relación con la luz la vivía más como una intuición que como un deber. Detrás de esta frase poética se encuentra toda una metodología de trabajo. Ese prueba_error con el que estos tres estudios han resuelto el uso de la iluminación en sus respectivos proyectos para Casa Decor. Desde su filosofía creativa, todos han ejecutado sus propios conocimientos -muy codo a codo con Simon- para lograr escenarios coherentes: desde el dramatismo decadente de El Santuario al entorno reflexivo de Zona de Estar, pasando por el rigor funcional que requiere un auditorio. Un equilibrio entre destreza técnica e intuición creativa para hacer, en palabras de la interiorista Mar Vera, que la luz sea la piel que acaricia los espacios.